Existe una variedad de alimentos que se pueden incluir en la dieta diaria de diversas formas que ayudan a prevenir el cáncer, y los principales son las frutas y verduras, así como los alimentos ricos en omega-3 y selenio.
El efecto anticancerígeno de estos alimentos se debe principalmente a que realizan un potente efecto antioxidante en el organismo, protegiendo a las células del daño causado por los radicales libres al ralentizar o inhibiendo su oxidación y evitando además mutaciones en el ADN de las células que las favorecen. ellos.formación de tumores.
Algunos de los alimentos que pueden ayudar a prevenir el cáncer, si se incluyen en una dieta sana y variada, son:
1. Brócoli
El brócoli es rico en sulforafanos y glucosinolatos, sustancias que actúan como antioxidantes y protegen a las células de los cambios en el ADN a medida que se multiplican. Estos alimentos también ayudan a controlar la apoptosis, que es la muerte programada de las células cuando presentan un defecto o cambio en su función.
Además del brócoli, otras verduras ricas en estas sustancias, como la coliflor, la col, las coles de Bruselas, la rúcula y los nabos, se recomienda consumir 5 o más porciones de estas verduras a la semana.
Algunos estudios científicos sugieren que consumir este tipo de alimentos puede reducir el riesgo de diversos cánceres, principalmente cánceres de estómago, pulmón, colon y mama.
2. Salsa o pasta de tomate
El tomate es rico en licopeno, uno de los antioxidantes más poderosos para el organismo y que tiene los mayores efectos probados en la prevención del cáncer en general, principalmente en el cáncer de próstata.
El licopeno está presente en concentraciones más altas en la salsa o pasta de tomate, proporcionando 55,45 mg de licopeno por 100 gramos, a diferencia del tomate crudo que proporciona 9,27 mg o el jugo de tomate que proporciona 10,77 mg; y su absorción es mayor cuando el tomate está cocido. Esta sustancia es un carotenoide que da color rojo a alimentos como tomates, guayaba roja, sandía, caqui, papaya, calabaza y pimiento rojo. Conozca los otros beneficios para la salud de los tomates.
3. Remolachas y verduras moradas
Las verduras violetas, rojas, rosas o azules son ricas en antocianinas, sustancias que también actúan como antioxidantes y protegen el ADN celular de los cambios, además de tener efectos antiinflamatorios y prebióticos en el organismo.
Estas sustancias están presentes en alimentos como: repollo morado, cebolla morada, berenjena, rábanos, remolacha o remolacha; así como frutas como azaleas, frambuesas, moras, arándanos, fresas, cerezas, uvas y ciruelas.
4. Nuez de Brasil
Las nueces de Brasil son ricas en selenio, un nutriente que actúa como antiinflamatorio en el cuerpo y como estimulante del sistema inmunológico, participando en varios procesos que mejoran la función celular y la producción de energía en el cuerpo. Además, este mineral tiene un efecto antioxidante en el organismo, previniendo la formación de radicales libres.
Además del cáncer de mama, el selenio ayuda a prevenir los cánceres de hígado, próstata y vejiga, y se encuentra en alimentos como carnes, aves, brócoli, cebollas, ajo, pepinos, repollo y mariscos.
5. Té verde
El té verde es rico en compuestos fenólicos, principalmente flavonoides y catequinas, que actúan como antioxidantes y antiinflamatorios, estimulando la apoptosis celular, que es la muerte programada de las células que representan un defecto en su funcionamiento.
Además, es probable que las catequinas reduzcan la proliferación vascular, reduzcan el crecimiento tumoral y prevengan varios cánceres, principalmente de próstata, gastrointestinal, mama, pulmón, ovario y vejiga.
Las catequinas están presentes en el té verde y también en el té blanco, que se derivan de la misma planta del té verde, Camellia sinensis. Obtenga más información sobre las otras propiedades del té verde y cómo prepararlo.
6. Soja
La soja y sus derivados, como el tofu y la bebida de soya, son ricos en sustancias llamadas fitoestrógenos, que se asemejan al estrógeno, una hormona producida naturalmente por las mujeres en la adolescencia.
De esta forma, los fitoestrógenos compiten con la hormona estrógeno, provocando un mejor equilibrio hormonal, impidiendo el desarrollo de células cancerosas. Un consejo importante para obtener estos beneficios es preferir el consumo de soja orgánica, que se produce sin pesticidas ni aditivos alimentarios.
Sin embargo, es importante señalar que en personas con alto riesgo de cáncer de mama o tumores dependientes de estrógenos hormonodependientes, se deben evitar estos alimentos ricos en fitoestrógenos, ya que algunos estudios sugieren que pueden modular el riesgo de desarrollar esta enfermedad. de cáncer. . Descubra cuáles son estos comestibles.
7. Pescado de mar
Los pescados de mar, como el atún, las sardinas y el salmón, son ricos en omega 3, una grasa saludable que actúa como antiinflamatorio en el organismo. Además, el pescado contiene vitamina D, que se asocia con una mejor regulación de las hormonas y la prevención del cáncer de mama, colon y recto.
Obtenga más información sobre la importancia de la vitamina D.