La vulvovaginitis es una inflamación simultánea de la vulva y la vagina que puede ser causada por una infección con virus, hongos o bacterias. Sin embargo, puede ocurrir debido a cambios hormonales e incluso alergias a químicos presentes en algunas espumas y cremas de baño, por ejemplo.
Si bien la vulvovaginitis puede ocurrir en todas las mujeres y a cualquier edad, es más común en aquellas que han comenzado a tener relaciones sexuales, ya que el contacto íntimo facilita el contacto con bacterias y, en algunos casos, un desequilibrio de la flora vaginal, es importante consultar al ginecólogo cuando aparezcan signos y síntomas que indiquen vulvovaginitis como irritación y enrojecimiento de la zona íntima, secreción con olor fuerte y ardor al orinar.
Síntomas principales
Algunos de los síntomas que ayudan a identificar esta inflamación incluyen:
- Irritación y enrojecimiento de la región íntima;
- Picazón constante;
- Hinchazón de la región íntima;
- Secreción vaginal con olor fuerte;
- Sangrado leve en ropa íntima;
- Malestar o ardor al orinar.
Ante la presencia de signos y síntomas que indiquen vulvovaginitis, es importante consultar a un ginecólogo para que pueda hacer un diagnóstico y comenzar el tratamiento adecuado.
Normalmente, el diagnóstico de vulvovaginitis se realiza mediante la evaluación de los signos y síntomas, pero su médico puede pedirle que analice su flujo vaginal para ver si es causado por un agente infeccioso.
Cómo se hace el diagnóstico
En la mayoría de los casos, el diagnóstico lo realiza el ginecólogo mediante un informe de los síntomas de la mujer, pero puede ser necesario recolectar una muestra de flujo vaginal para analizarla en un laboratorio e identificar la causa exacta y comenzar el tratamiento adecuado.
Causas de vulvovaginitis
La vulvovaginitis puede ocurrir como consecuencia de diversas situaciones, las principales de las cuales son:
- Exceso de hongos, como una infección por hongos;
- Infecciones de virus o bacterias;
- Antihigiénico o usando ropa interior muy ajustada;
- Infección por parásitos., como sarna o gusanos;
- Trastornos hormonales, que puede provocar un desequilibrio de la flora vaginal e inducir inflamación.
Además, algunas mujeres pueden desarrollar vulvovaginitis debido a hipersensibilidad a ciertos químicos, como parabenos o sulfato de sodio, que están presentes en jabones, detergentes para ropa o cremas. En estos casos, los síntomas aparecen poco después de usar el producto y mejoran cuando se lava la zona con agua tibia y jabón íntimo adecuado.
Cómo se realiza el tratamiento
El tratamiento varía dependiendo de la causa de la vulvovaginitis, en caso de infección bacteriana se deben usar antibióticos, mientras que en caso de exceso de hongos se deben usar antifúngicos. De esta forma, siempre es importante consultar a un ginecólogo para indicar el tratamiento adecuado.
Sin embargo, se puede realizar un tratamiento en el hogar para aliviar los síntomas y acelerar el tratamiento recomendado por un médico. Es buena idea realizar baños sedentarios con 3 cucharadas de vinagre de manzana o sal gorda, ya que ayudan a eliminar los microorganismos presentes y calman la irritación.
Además, debes usar ropa interior de algodón, faldas y vestidos que ayuden a ventilar la zona genital, evitando que la infección empeore. Obtenga más información sobre el tratamiento de la vulvovaginitis.