El vitiligo es una enfermedad de la piel caracterizada por un cambio o ausencia de los melanocitos, que son las células encargadas de producir melanina, un pigmento que da color a la piel, el cabello y los ojos. Debido a esta ausencia de producción de melanina, aparecen manchas blancas en todo el cuerpo, principalmente en manos, pies, rodillas, cara y codos, y en algunos casos puede haber una decoloración adicional del cabello y el cabello. para cambiar la sensibilidad del área.
Aunque su causa aún no está clara, se cree que está relacionada con factores genéticos, ambientales e inmunes y puede ser causada por trastornos autoinmunes o situaciones estresantes, por ejemplo. Cabe recordar que el vitiligo no es contagioso, pero puede ser hereditario y más común en miembros de una misma familia.
El vitiligo no tiene cura, sin embargo, existen varias formas de tratamiento que ayudan a mejorar la apariencia de la piel, reducir la inflamación en la zona y estimular la repigmentación de las zonas afectadas, como inmunosupresores dirigidos, corticoesteroides o fototerapia, por ejemplo. dermatólogo.
Posibles Causas
Aunque todavía no existe un motivo específico para este cambio, se cree que el vitíligo está relacionado con factores genéticos, ambientales e inmunológicos, y los principales son:
- Problemas que afectan el sistema inmunológico, lo que hace que ataque a los melanocitos;
- Enfermedades hereditarias transmitidas de padres a hijos;
- Lesiones cutáneas, como quemaduras o exposición a productos químicos.
Algunas personas también pueden desarrollar la enfermedad o empeorar las lesiones después de un período de estrés o trauma emocional.
Principales síntomas
El síntoma principal del vitiligo es la aparición de manchas blancas en las zonas más expuestas al sol, como las manos, la cara, los brazos o los labios. Al principio, suele aparecer como una mancha pequeña y única que puede aumentar de tamaño y cantidad si no se aplica ningún tratamiento. Según dónde aparezcan las manchas, el vitíligo se puede clasificar en:
- Unilateral o segmentariamente: cuando ocurre en un lado del cuerpo;
- Bilateral o no segmentario: en el que aparecen zonas blancas a ambos lados del cuerpo.
Los síntomas del vitíligo son más comunes antes de los 20 años, pero pueden ocurrir a cualquier edad y en cualquier tipo de piel, aunque es más común en personas con piel más oscura. A pesar de que en la mayoría de los casos solo se nota la presencia de manchas blancas en la piel, algunas personas también pueden perder el cabello y el color del cabello, además de experimentar una alteración de la sensibilidad en la zona.
¿Se transmite el vitiligo?
Debido a que no es causado por ningún microorganismo, el vitiligo no se transmite de persona a persona; por esta razón, no existe riesgo de infección cuando se toca la piel de una persona con esta afección.
Cómo se hace el diagnóstico
El diagnóstico de vitiligo lo realiza un dermatólogo observando los signos y síntomas que se muestran, pues las manchas de vitiligo son muy características y aparecen en determinadas zonas del cuerpo.
Sin embargo, en algunos casos, para poder realizar un diagnóstico diferencial con otras enfermedades de la piel, el médico puede ordenar una biopsia de las manchas, principalmente para valorar la presencia o ausencia de melanocitos, además de realizar un examen con lámpara. Árbol para identificar áreas de vitiligo que emiten fluorescencia específica cuando se exponen a la luz ultravioleta.
También es importante hacerse análisis de sangre, principalmente inmunológicos, para confirmar si existe algún indicio de que el vitíligo esté asociado a un trastorno autoinmune, ya que esto permitirá al médico sugerir el tratamiento adecuado.
Tratamiento del vitiligo
El vitiligo no tiene cura, pero el tratamiento se realiza para reducir la apariencia de áreas libres de melanina, mejorar el aspecto de la piel y evitar cambios en la sensibilidad local, que pueden ocurrir en algunos casos.
De esta forma, el dermatólogo puede sugerir la realización de fototerapia con el fin de promover la protección de las zonas afectadas de la piel, así como el uso de fármacos que sean capaces de estimular la producción de melanocitos. Además, se puede recomendar el uso de corticosteroides y / o inmunosupresores, que deben usarse de acuerdo con las instrucciones médicas.
Debido a que las áreas libres de melanina son más susceptibles a la luz solar, es importante que la persona use ropa que cubra estas áreas y, si es posible, use un protector solar con factor de protección alto (FPS). En algunos casos, es posible ocultar incluso las áreas más blancas con maquillaje, porque está designado como un producto que contiene protector solar.
En algunos casos, puede ser necesario el apoyo psicológico, especialmente en el caso de los niños, ya que pueden creer que son diferentes a otras personas. Además, incluso si no es una enfermedad contagiosa, puede haber sesgos, lo que también puede complicar el proceso de aceptación.