El tratamiento para el sarampión consiste en aliviar los síntomas mediante el reposo, la hidratación y medicamentos como el paracetamol durante aproximadamente 10 a 14 días mientras dure la enfermedad. Esta enfermedad es más común en los niños y su tratamiento se realiza para controlar síntomas desagradables como fiebre, malestar, falta de apetito y manchas rojizas en la piel que pueden evolucionar a pequeñas llagas o úlceras.
El sarampión es una enfermedad altamente contagiosa, que se transmite a través de gotitas de saliva que se esparcen por el aire, que es el período de mayor riesgo de transmisión después de la aparición de manchas en la piel.
Medicamentos de farmacia
Su médico puede sugerirle el uso de antipiréticos y analgésicos para aliviar la fiebre y el dolor como paracetamol y / o ibuprofeno si no contienen ácido acetilsalicílico, y los medicamentos como AAS o Aspirina están contraindicados, por ejemplo.
La suplementación con vitamina A puede ser útil para los niños con sarampión porque reduce el riesgo de muerte, lo que está indicado en los casos en que existe una deficiencia de esta vitamina, que se puede evaluar mediante un análisis de sangre o cuando la tasa de mortalidad por sarampión es alta. La dosis debe inyectarse y debe repetirse 24 horas más tarde y más tarde en 4 semanas.
Los antibióticos no están indicados para el tratamiento del sarampión porque no pueden mejorar los síntomas causados por el virus, pero se pueden recetar si su médico nota que existe una infección bacteriana asociada con el virus del sarampión.
Cómo aliviar los síntomas del sarampión
Como no existe un tratamiento específico para eliminar el virus del cuerpo, el tratamiento sirve para aliviar los síntomas y debe incluir:
1. Continúe descansando y bebiendo agua.
El descanso es importante para que el cuerpo se recupere y tenga la energía para combatir el virus. También debes beber mucha agua, tés o agua de coco para mantener tu cuerpo hidratado y capaz de recuperarse. Vea cuánta agua necesita beber por día.
3. Use compresas frías
El sarampión puede causar conjuntivitis y los ojos pueden volverse muy sensibles a la luz y enrojecerse, produciendo mucha secreción. Para solucionar esto, los ojos se pueden limpiar con una compresa fría empapada en suero fisiológico, siempre que haya una secreción. Además, usar anteojos oscuros en interiores puede ser útil para reducir la incomodidad debido a la sensibilidad a la luz.
Las compresas frías también pueden ayudar a reducir la fiebre empapando una gasa en agua fría y colocándola en la frente, el cuello o las axilas para ayudar a bajar la temperatura corporal de forma natural.
4. Humedezca el aire
Es posible humidificar el aire para fluidizar las secreciones, facilitando su salida, colocando un balde de agua en la habitación donde se encuentra el individuo. Este cuidado también ayuda a mantener la laringe menos irritada, aliviando el dolor de garganta. En caso de tos persistente, su médico puede recetarle algún medicamento para la tos como desloratadina, por ejemplo. Vea cómo humidificar el aire con más detalle.
¿Cuánto dura el sarampión?
La duración del sarampión es de aproximadamente 8 a 14 días, pero en la mayoría de las personas es de 10 días. Cuatro días antes de que aparezcan los primeros síntomas de la enfermedad hasta su completa remisión, el individuo puede transmitir el virus a otras personas, por lo que es muy importante que todos los que lo rodean reciban la vacuna triple viral, que los protegerá del sarampión, paperas. y rubéola.
Posibles complicaciones
El sarampión es una enfermedad autolimitada que generalmente no causa complicaciones, pero en casos muy raros el sarampión puede causar:
- Infecciones bacterianas como neumonía u otitis media;
- Equimosis o sangrado espontáneo, ya que el recuento de plaquetas puede reducirse significativamente;
- Encefalitis, tipo de infección cerebral;
- Panencefalitis esclerosante subaguda, una complicación grave del sarampión que causa daño cerebral.
Estas complicaciones del sarampión son más comunes en personas desnutridas o que tienen un sistema inmunológico comprometido.
Cómo evitar el sarampión
La mejor forma de evitar contagiarse con el virus del sarampión es vacunarse contra el sarampión, que está especialmente indicada a los 12 meses, con una dosis de refuerzo de 5 años, pero que se puede administrar a cualquier persona que no haya sido vacunada.
Las personas que han sido vacunadas están protegidas de por vida y no deben preocuparse si hay un caso de sarampión en una región cercana. Sin embargo, las personas que no han sido vacunadas pueden contagiarse con el virus, por lo que no deben entrar en contacto con estas personas y acudir de inmediato al centro de salud para vacunarse.
Señales de advertencia para ir al médico.
Debe consultar a un médico si presenta síntomas como:
- Fiebre superior a 40ºC porque existe riesgo de convulsiones;
- Si la persona vomita por toser;
- Signos de deshidratación como ojos profundos, piel muy seca, llanto sin lágrimas y micción leve;
- Si no puede beber líquidos;
- Si se presentan otros síntomas.
Estos signos pueden indicar que la afección ha empeorado, lo que requiere una nueva evaluación médica, ya que se pueden usar otros medicamentos. Si la situación es más grave, el individuo puede ser hospitalizado para hidratación intravenosa.
Hay casos muy raros en los que una persona con sarampión sufre complicaciones, pero pueden ocurrir si tiene un sistema inmunológico muy débil o si el virus llega al cerebro, lo cual no es común. Vea más sobre el virus del sarampión en el video a continuación: