El tratamiento para el reflujo gastroesofágico generalmente comienza con cambios en el estilo de vida, así como con ajustes en la dieta, ya que en muchos casos estos cambios relativamente simples pueden aliviar los síntomas sin la necesidad de un tratamiento adicional.
Sin embargo, si los síntomas no mejoran, el gastroenterólogo puede sugerir el uso de algunos medicamentos que se pueden usar a largo plazo o durante las convulsiones. En casos más complicados donde los medicamentos pueden mejorar los síntomas, su médico puede recomendarle una cirugía para tratar la causa del reflujo. Obtenga más información sobre los síntomas del reflujo.
Las principales formas de tratamiento utilizadas en casos de reflujo incluyen:
1. Cambios en el estilo de vida
Las personas que tienen un estilo de vida menos saludable tienen un mayor riesgo de desarrollar diversos problemas de salud. Uno de ellos es la producción excesiva de ácido gástrico, que puede provocar síntomas de reflujo.
De esta forma, cualquier persona que padezca reflujo o que quiera evitar su manifestación, debe seguir estas indicaciones:
- Mantenga un peso adecuado, ya que el exceso de peso crea más presión en el abdomen, aumentando las posibilidades de que el ácido gástrico regrese al estómago, empeorando los síntomas;
- Evite fumar, ya que los cigarrillos pueden afectar la capacidad del esfínter esofágico para cerrarse, permitiendo que el reflujo ocurra con mayor frecuencia;
- Evite acostarse hasta 2 horas después de comer, ya que hay una mayor cantidad de ácido estomacal en ese período;
- Evite usar ropa muy ajustada, especialmente camisas y pantalones por encima del ombligo, ya que puede ejercer presión sobre el abdomen y empeorar el reflujo.
Además, es muy importante que al estar acostado, la cabecera de la cama esté más alta que el nivel de los pies. Para ello, puede poner algo debajo del colchón o poner una cuña de madera debajo de los pies del cabecero. Se recomienda elevar la cabecera de la cama entre 15 y 20 cm.
2. Ajustar la dieta
Además de los cambios de estilo de vida mencionados anteriormente, existen otras técnicas simples y naturales que ayudan a paliar los síntomas y están principalmente relacionadas con la dieta.
De esta forma, es deseable ingerir comidas con más regularidad, por ejemplo cada 2 horas, pero con menos comida. Esto ayuda a mantener el estómago menos lleno y facilita el vaciado, previniendo el reflujo.
Además, aumente la ingesta de verduras y frutas, así como evite los alimentos menos saludables, como los alimentos industrializados y las carnes rojas y fritos, ya que esto también reduce la cantidad de ácido del estómago, lo que alivia los síntomas. Otro consejo importante es regular el consumo de algunas bebidas, especialmente las relacionadas con la producción de reflujo, como refrescos, café y bebidas alcohólicas.
Obtenga más información sobre la dieta con enfermedad por reflujo gastroesofágico.
3. Uso de drogas
En la mayoría de los casos, los medicamentos para el reflujo son recetados por el médico como SOS, es decir, para usarse durante una crisis de reflujo, que puede ocurrir cuando ciertos alimentos se consumen en exceso.
Sin embargo, los medicamentos pueden usarse durante mucho tiempo, especialmente en personas que tienen síntomas muy fuertes o frecuentes. Algunos de los más destacados incluyen:
- Antiácidos, como el hidróxido de magnesio o aluminio: neutralizan la acidez del estómago y previenen la sensación de ardor en el esófago.
- Inhibidores de la producción de ácido, tales como omeprazol, esomeprazol o pantoprazol: que inhiben la producción de ácido gástrico al reducir la combustión por reflujo.
- Aceleradores de vaciamiento gástrico, un hijo metroEtoclopramida y domperidona: aceleran el vaciamiento gástrico, reduciendo el tiempo que los alimentos permanecen en este órgano.
- Protectores gástricos, como sucralfato: forman una barrera protectora en el revestimiento del estómago y el esófago.
Por esta razón, debido a que los síntomas y las causas del reflujo varían mucho de una persona a otra, la medicación siempre debe ser prescrita por un médico, quien evaluará la historia clínica e indicará la dosis y la duración del tratamiento farmacológico.
4. Remedios caseros
En los casos más leves de reflujo, los remedios caseros pueden ser una buena forma natural de aliviar los síntomas. Algunos de los más populares son el té de jengibre, el té de manzanilla y el jugo de aloe vera, por ejemplo, que se pueden tomar cuando aparecen los primeros síntomas de ardor.
Aunque son una buena forma natural de aliviar los síntomas, los remedios caseros no deben reemplazar los medicamentos de venta libre y solo deben usarse como complemento de un tratamiento recetado por un médico.
Vea cómo aliviar naturalmente los síntomas del reflujo en el siguiente video:
Vea otros remedios caseros para la ERGE.
5. Cirugía
La cirugía de reflujo gastroesofágico generalmente se usa como último recurso, en casos más complicados donde los síntomas no mejoran con cambios en el estilo de vida, ajustes dietéticos o uso de medicamentos.
En estos casos, el cirujano realiza una cirugía para fortalecer el esfínter esofágico para evitar el retorno del ácido gástrico al esófago. Esta cirugía se puede realizar de forma clásica, con una incisión en el abdomen, pero también se puede realizar con laparoscopia, en la que se hacen pequeños orificios en la piel y se colocan dispositivos especiales, sin necesidad de grandes incisiones y aceleración. procedimiento Renovación. El tipo de cirugía debe elegirse junto con el cirujano.
Obtenga más información sobre la recuperación de la cirugía por reflujo.