Los tratamientos para la artritis reumatoide deben ser recetados por un reumatólogo, ya que los medicamentos recetados pueden variar según los síntomas que presente la persona y la etapa de la enfermedad. Además del tratamiento farmacológico, se recomienda fisioterapia para activar las articulaciones, fortalecer los músculos y aliviar los síntomas. También es importante cambiar tus hábitos alimenticios, consumir diariamente alimentos con propiedades antiinflamatorias para paliar los síntomas.
La artritis reumatoide es una enfermedad crónica, sistémica, inflamatoria, autoinmune que provoca síntomas como dolor y rigidez en las articulaciones, principalmente al despertar, y que no tiene cura. El tratamiento de la artritis establecido tiene como objetivo aliviar los síntomas, prevenir la progresión de la enfermedad y mejorar la calidad de vida.
Las mejores opciones de tratamiento son:
1. Remedios para la artritis reumatoide
Idealmente, el tratamiento farmacológico para la artritis reumatoide debe iniciarse dentro de los primeros 12 meses del desarrollo de la enfermedad, ya que la farmacoterapia temprana ayuda a prevenir daños más graves, mejorando así la capacidad funcional.
Algunos ejemplos de medicamentos de uso común incluyen:
- Fármacos antirreumáticos modificadores de la enfermedad (FARME): son la primera línea de tratamiento, que debe iniciarse inmediatamente después del diagnóstico;
- Analgésicos y antiinflamatorios: se utilizan principalmente para aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida.
El tratamiento farmacológico debe realizarse de acuerdo con las recomendaciones del médico y es importante que la persona tenga un seguimiento médico constante para determinar la respuesta del organismo al tratamiento.
2. Fisioterapia para la artritis reumatoide
La fisioterapia es una excelente manera de reducir el dolor y la inflamación y mejorar la calidad del movimiento de la articulación afectada. La fisioterapia también es importante para el fortalecimiento y el estiramiento adecuados de los músculos, así como para evitar o reducir las deformidades de las articulaciones.
La fisioterapia debe incluir estiramientos y ejercicios activos y pasivos, así como el uso de dispositivos de electroterapia y almohadillas de agua caliente. También puede estar indicado el ejercicio aeróbico, como caminar, andar en bicicleta, nadar e hidro-gimnasia.
3. Cirugía de la artritis reumatoide
Cuando la artritis reumatoide genera deformidades que reducen la calidad de vida de una persona, el reumatólogo junto con el ortopedista pueden valorar la necesidad de una cirugía de deformidades. Sin embargo, esto dependerá de la salud general del individuo y de sus actividades diarias.
4. Tratamiento adicional para la artritis
El tratamiento adicional para la artritis reumatoide se puede realizar con dieta, meditación, acupuntura, auriculoterapia, masajes, quiropráctica, entre otros; sin embargo, aunque pueden mejorar la calidad de vida, no excluyen la necesidad de tratamiento clínico y fisioterapéutico.
5. Tratamiento natural de la artritis reumatoide
El tratamiento natural se puede realizar mediante el uso de plantas medicinales que tienen propiedades antiinflamatorias, analgésicas y diuréticas, en forma de té, jugo o cataplasma, ya que ayudan a aliviar los síntomas, lo que repercute directamente en la calidad de vida. .
Sin embargo, este tipo de tratamiento nunca debe reemplazar la medicación prescrita por el médico y, además, estos medicamentos solo deben usarse con el conocimiento y autorización de un reumatólogo. Algunos buenos ejemplos incluyen:
- Té de cola de caballo, hinojo y bardana;
- Beba jugo de berenjena con limón al despertar;
- Beba jugo de piña a diario.
El té de sucupira también es excelente gracias a que esta planta se puede consumir en forma de cápsulas. En el siguiente video puedes ver las otras opciones de analgésicos naturales y antiinflamatorios que se pueden incluir en la dieta diaria:
Signos de mejora y deterioro.
Los signos de mejoría aparecen con el tratamiento adecuado e incluyen la reducción de los síntomas y la mejora del movimiento; sin embargo, los síntomas tienden a ser más intensos y pueden ocurrir complicaciones si no se administra el tratamiento.
Como no existe cura para esta enfermedad, es necesario realizar el tratamiento a lo largo de la vida, también es importante evitar el humo, las bebidas alcohólicas y hacer ejercicio de forma regular y bajo la supervisión de un preparador físico o profesional de educación física.
Complicaciones de la artritis reumatoide
La afectación de huesos, cartílagos, cápsula articular, tendones, ligamentos y músculos puede provocar deformidades de las articulaciones, que pueden dificultar el movimiento y crear una apariencia incómoda en la persona.
Debido a que la enfermedad es progresiva y no hay cura, con el tiempo, la persona puede presentar deformidades como dedos de los pies «agrietados» y dedos de los pies en «cuello de cisne», rodillas invertidas, cambios en la columna vertebral, tendones agrietados y erosiones de las articulaciones y pies planos. . Para prevenir estas complicaciones, se recomienda continuar el tratamiento prescrito por un médico y realizar sesiones regulares de fisioterapia.