Hay varios tipos de dolores de cabeza que pueden ocurrir por diferentes razones y en diferentes regiones de la cabeza. Algunos tipos de dolores de cabeza pueden incluso estar acompañados de otros síntomas, según la causa subyacente.
El tratamiento depende del tipo de dolor de cabeza y generalmente consiste en administrar analgésicos y antiinflamatorios o fármacos que traten la causa, como en el caso de la sinusitis, por ejemplo.
1. Dolor de cabeza por tensión
Este es un tipo de dolor de cabeza causado por rigidez en los músculos del cuello, espalda o cuero cabelludo, que es causado por una mala postura, estrés, ansiedad o mala postura durante el sueño.
Los síntomas más comunes de un dolor de cabeza tenso son un dolor leve a moderado, presionando como un casco en la cabeza, que afecta a ambos lados del cuello o la frente, e hipersensibilidad en los hombros, el cuello y el cuero cabelludo, así como la luz y el ruido. Este tipo de dolor de cabeza no causa náuseas ni empeora con la actividad física. Ver // dolor de cabeza por tensión /.
Hacer: Para aliviar los dolores de cabeza tensionales, debes intentar relajarte con un masaje en el cuero cabelludo, un baño caliente o realizando alguna actividad, por ejemplo. En caso de que no dé resultados, puede ser necesario tomar analgésicos, como paracetamol, ibuprofeno o aspirina, por ejemplo.
2. Migraña
La migraña se caracteriza por dolores de cabeza intensos y punzantes, que pueden ir acompañados de náuseas, vómitos, mareos y sensibilidad a la luz.
Este tipo de dolor de cabeza puede ser de moderado a severo y puede durar desde unos minutos hasta horas, y en algunos casos puede durar hasta 72 horas. Por lo general, afecta más a un lado de la cabeza y los síntomas pueden volverse discapacitados o empeorar, deteriorando la visión y provocando sensibilidad a ciertos olores y dificultad para concentrarse.
Qué hacer: lLos medicamentos más utilizados para las migrañas son los analgésicos y antiinflamatorios, como el paracetamol, el ibuprofeno o la aspirina, que ayudan a aliviar el dolor en algunas personas, así como los fármacos que estrechan los vasos sanguíneos y bloquean el dolor, como en el caso de los triptanos. . , como Zomig, Naramig o Sumax, por ejemplo.
Las personas que tienen mareos y vómitos pueden tomar antieméticos, como metoclopramida, por ejemplo. Obtenga más información sobre los medicamentos que ayudan a tratar y prevenir las migrañas.
3. Dolor de cabeza asociado con sinusitis
La sinusitis se caracteriza por la inflamación de los senos paranasales, que suele causar dolores de cabeza o dolor facial, que empeora cuando la cabeza se inclina hacia adelante o la persona está acostada.
Además del dolor de cabeza causado por la sinusitis, pueden aparecer otros síntomas, como dolor en los lados de la nariz y alrededor de los ojos, secreción y congestión nasal, tos, fiebre y mal aliento.
Hacer: Para tratar la sinusitis y aliviar los dolores de cabeza, puedes usar antihistamínicos, como loratadina o cetirizina, por ejemplo, descongestionantes, como fenilefrina, y analgésicos, como paracetamol, por ejemplo.
En caso de que se desarrolle la infección, puede ser necesario tomar un antibiótico. Obtenga más información sobre el tratamiento de la sinusitis.
4. Dolor de cabeza en racimo
La cefalea en racimo es una enfermedad rara, caracterizada por un dolor de cabeza intenso e insoportable, más fuerte que la migraña. Se manifiesta en un lado de la cara y ocurre mientras la persona duerme, por lo general interrumpiendo. El dolor puede ser muy intenso y repetirse varias veces durante el día.
Otros síntomas que pueden ocurrir durante un ataque incluyen secreción nasal, hinchazón y enrojecimiento de los párpados, así como lagrimeo del ojo del mismo lado del dolor.
Hacer: En general, la enfermedad no tiene cura y los tratamientos no son muy efectivos, ni resuelven crisis, solo alivian o reducen su duración. Los fármacos más utilizados son los antiinflamatorios no esteroideos y los analgésicos potentes, como los opioides y una máscara de oxígeno al 100% en tiempos de crisis.
Los dolores de cabeza, además de las causas anteriores, también pueden ocurrir debido a cambios hormonales, hipertensión o lesiones en la cabeza.