El Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad, conocido por el acrónimo TDAH, se caracteriza por la presencia de síntomas como distracción, hiperactividad y / o impulsividad. Es una enfermedad común de la niñez, pero puede continuar en los adultos si no se trata en la niñez.
Los primeros signos de este trastorno aparecen alrededor de los 7 años, porque entre los 6 y los 7 años maduran las estructuras que regulan la atención y la conducta. Además, los niños son más fácilmente reconocibles por los signos, que suelen ser excesiva falta de atención, excitación, terquedad, agresión o actitudes impulsivas que provocan que el niño se comporte de forma inapropiada, lo que afecta su rendimiento escolar, porque no presta atención, no se concentra y se distrae fácilmente, además de causar un gran estrés y tensión en los padres, familiares y cuidadores.
Si tiene dudas sobre el TDAH, responda las siguientes preguntas de la prueba para averiguar el riesgo:
Sepa si su hijo es hiperactivo
Iniciar la prueba ¿Se frota mucho los brazos, las piernas o se mueve mucho en la silla?
- sí
- no
¿Está el niño desorganizado y deja todo en su lugar?
- sí
- no
¿Es difícil para un niño mantener la calma mientras mira una película hasta el final?
- sí
- no
¿Parece que el niño no escucha cuando le hablas y lo dejas hablar solo?
- sí
- no
¿Te molestas demasiado y te subes a los muebles o gabinetes incluso cuando es totalmente inapropiado?
- sí
- no
No le gustan las actividades tranquilas y pacíficas como el yoga o la meditación en absoluto.
- sí
- no
¿Tiene dificultad para esperar su turno y estar frente a los demás?
- sí
- no
¿Tiene problemas para permanecer sentado durante más de 1 hora?
- sí
- no
¿Se distrae fácilmente en la escuela o cuando habla con él?
- sí
- no
¿Estás muy molesto cuando escuchas música o estás en un nuevo entorno con mucha gente?
- sí
- no
¿Quiere el niño picar o morder, haciéndolo a propósito?
- sí
- no
¿Tiene el niño dificultad para seguir las instrucciones dadas por otra persona?
- sí
- no
¿Tiene el niño dificultad para prestar atención en la escuela y distraerse de un juego que disfruta?
- sí
- no
¿Tiene el niño dificultad para completar una tarea porque está distraído y comienza con otra?
- sí
- no
¿Tiene dificultad para jugar con calma y calma?
- sí
- no
¿Habla mucho el niño?
- sí
- no
¿El niño a menudo interrumpe o molesta a los demás?
- sí
- no
¿Parece que el niño no escucha a menudo lo que se dice?
- sí
- no
¿Siempre pierde las cosas que necesita para la tarea o las actividades en la escuela o en casa?
- sí
- no
¿Quiere el niño participar en actividades peligrosas sin considerar las posibles consecuencias?
- sí
- no
Principales síntomas
Una vez que vea que el TDAH es un trastorno complejo, sus signos y síntomas se dividen en 3 grupos:
Sobre falta de atención, que se puede identificar por:
- Dificultad para prestar atención o cometer errores por descuido en las actividades recreativas, escolares o laborales;
- Finge que no está escuchando cuando le hablas;
- No seguir las instrucciones para las tareas escolares, domésticas o profesionales;
- Perder cosas necesarias para tareas o actividades;
- Evite tareas que requieran un esfuerzo constante;
- Olvidarse a menudo de las actividades diarias.
Sobre hiperactividad – impulsividad tiene las siguientes características:
- Sacuda los brazos o las piernas o muévase mucho en la silla mientras está sentado;
- Levantarse de una silla en el aula u otras situaciones en las que se espera que se siente;
- Correr o trepar objetos de forma excesiva, en situaciones inapropiadas;
- Dificultad para jugar o quedarse callado en actividades libres;
- Estar a menudo «en la cima» o actuar a menudo como «a todo vapor»;
- Hablar demasiado.
- Dar respuestas rápidas antes de que se cierren las preguntas;
- Tiene dificultad para esperar su turno;
- Interrupción o injerencia en los asuntos de otras personas.
Un niño hiperactivo puede demostrar este comportamiento en cualquier lugar, como en la escuela, en casa, en la iglesia, y es muy estresante para los padres, tutores o maestros. Antes de considerar la falta de atención y la hiperactividad, es importante observar las señales que está mostrando el niño y tratar de entenderlas, porque por ejemplo, el nerviosismo, el miedo o la fatiga son situaciones que también pueden generar cambios de comportamiento.
Que hacer en caso de duda
Si se sospecha de TDAH, es importante consultar a un pediatra para controlar el comportamiento del niño y evaluar si existe la necesidad de preocuparse. Si identifica signos del trastorno, es posible que desee consultar a otro especialista, ya que el diagnóstico de trastorno por déficit de atención e hiperactividad generalmente lo realiza un psiquiatra preescolar o un neuropediatra.
El diagnóstico es completamente clínico, que se realiza observando el comportamiento del niño en la escuela, en el hogar y en cualquier otro lugar del día para confirmar si hay al menos 6 signos que indiquen la presencia de un trastorno.
El tratamiento de este trastorno incluye el uso de fármacos estimulantes y no estimulantes como metilfenidato, atomoxetina y lisdexamphetamina, así como psicoterapia o una combinación de ambos. Obtenga más información sobre el tratamiento del TDAH.
¿Cuál es la diferencia entre hiperactividad y autismo?
El trastorno por déficit de atención con hiperactividad se puede confundir fácilmente con el autismo e incluso puede causar cierta confusión a los padres y miembros de la familia. Esto se debe a que ambos trastornos comparten síntomas similares, como dificultad para prestar atención, no mantener la calma o tener dificultad para esperar en la fila.
Sin embargo, son trastornos completamente diferentes, especialmente en el origen de cada problema. Mientras que en la hiperactividad los síntomas están relacionados con la forma en que el cerebro crece y se desarrolla, en el autismo existen varios problemas con el pleno desarrollo del niño que pueden afectar el lenguaje, el comportamiento, la interacción social y la capacidad de aprender. Sin embargo, es posible que un niño tenga TDAH y autismo al mismo tiempo.
Como puede ser difícil para los padres identificar las diferencias entre los dos trastornos en el hogar, lo ideal es consultar a un pediatra o psicólogo para que puedan hacer un diagnóstico preciso a través de la evaluación y comenzar un tratamiento que se adapte a las necesidades adecuadas. niño.