La rinitis alérgica es una afección genética, es decir, transmitida de padres a hijos, en la que la mucosa nasal es más sensible y se inflama al contacto con determinadas sustancias, provocando una reacción alérgica que provoca síntomas como los estornudos. , secreción nasal y picazón en la nariz, por ejemplo.
Generalmente, una crisis de rinitis alérgica ocurre después de que una persona entra en contacto con sustancias alergénicas como polvo, pelo de perro, polen o algunas plantas, por ejemplo, y puede ser más común en primavera u otoño.
La rinitis alérgica no tiene cura, por lo que el tratamiento incluye cambios de hábitos como evitar el contacto con las sustancias que provocan los síntomas, en los casos más leves, y el uso de antihistamínicos para quienes tienen convulsiones recurrentes.
Principales síntomas
Los principales síntomas de la rinitis alérgica incluyen:
- Prurito de nariz, ojos y boca;
- Ojos y nariz enrojecidos;
- Fatiga excesiva;
- Dolor de cabeza;
- Ojos hinchados;
- Tos seca;
- Estornudos
- Nariz que moquea
Cuando se presentan estos síntomas, es importante consultar a un médico de cabecera o alergólogo para iniciar el tratamiento adecuado según el alérgeno causante de los síntomas, con el fin de evitar complicaciones como otitis, problemas de sueño o el desarrollo de sinusitis crónica.
Cómo confirmar el diagnóstico
El diagnóstico de rinitis alérgica se realiza a través de la información que el paciente entrega al médico de cabecera, quien lo derivará al tratamiento adecuado.
Sin embargo, en los casos más graves, es decir, cuando la reacción alérgica afecta la vida de una persona, con ataques prolongados de estornudos que pueden provocar dolor de cabeza o debilidad recurrente, por ejemplo, el médico de cabecera puede derivar el caso a un alergólogo que sea médico. especializada en alergias, que mediante pruebas de laboratorio identificará qué sustancias son las responsables de provocar la rinitis alérgica.
Una de las pruebas que se pueden realizar es una punción o prueba de punción cutánea, en la que la persona se expone a pequeñas cantidades de sustancias que provocan alergias cutáneas, generalmente en el brazo o la espalda, y en la zona donde se coloca el alérgeno. , se vuelve roja y grumosa, lo que significa que la persona es alérgica a la sustancia especificada. Vea cómo se hace la prueba de alergia.
Otra prueba que se puede realizar es la prueba de absorción de radioalergia (RAST), un tipo de análisis de sangre que mide la cantidad de anticuerpos llamados IgE, que se elevan cuando una persona tiene una reacción alérgica.
Cómo se realiza el tratamiento
El tratamiento de la rinitis alérgica debe ser dirigido por un médico generalista o alergólogo, y generalmente se realiza evitando el contacto con sustancias alérgicas en casos leves a moderados. Ahora, en los casos más graves, puede ser necesario el uso de antihistamínicos, como desloratadina o cetirizina, para reducir la alergia y reducir los síntomas de la rinitis.
Vea otros medicamentos para aliviar los síntomas de la rinitis alérgica.
Opción de tratamiento natural
En épocas de crisis con rinitis alérgica, cuando los síntomas son más fuertes, se puede aliviar con remedios caseros, como lavarse la nariz con suero fisiológico o con 300 ml de agua mineral y 1 cucharadita de sal. Para hacer esto, simplemente inhale un poco de esta mezcla, haga un pequeño masaje en la nariz y luego tírela.
Además, inhalar el vapor del té de eucalipto antes de acostarse puede prevenir los síntomas al día siguiente.