La neumonía atípica es una infección de los pulmones causada por microorganismos con menos frecuencia que la neumonía normal, que incluye virus, Mycoplasma pneumoniae, Legionella pneumophila o Chlamydophila pneumoniae.
Este tipo de neumonía generalmente se transmite por contacto con gotitas de saliva de una persona infectada, haciéndola más común en personas que comparten espacios reducidos, como presos o militares, lo cual es una sospecha importante cuando toda la familia tiene lo mismo. síntomas.
Aunque se conoce como neumonía grave, la neumonía atípica tiene cura y se puede tratar en casa con reposo y el uso de antibióticos recetados por un médico o neumólogo. Lo que pasa es que al ser provocado por otro tipo de microorganismos más raros, su tratamiento puede resultar más difícil y más lento, con mayor probabilidad de complicaciones.
Síntomas principales
Los signos y síntomas de la neumonía atípica pueden ser ligeramente diferentes a los de la neumonía común e incluyen:
- Temperatura baja constante;
- Tos seca que empeora con el tiempo;
- Catarro nasal;
- Respiración dificultosa;
- Dolor de pecho;
- Dolor de garganta;
- Dolor de músculos y articulaciones;
- Fatiga leve.
Los síntomas de la neumonía atípica pueden tardar de 3 a 10 días en aparecer y pueden empeorar durante varias semanas.
Cómo confirmar el diagnóstico
El diagnóstico de neumonía atípica generalmente se indica mediante la evaluación de un médico, quien analizará los síntomas y determinará si ha habido contacto con otra persona que pueda tener una infección respiratoria.
El médico también evalúa los signos de gravedad y ordena análisis de sangre y una radiografía de tórax, especialmente para comprender el tipo de neumonía, ya que el patrón que aparece en los resultados de las radiografías y los análisis de sangre tiende a ser diferente. en caso de neumonía atípica.
Cómo se transmite y quién corre mayor riesgo
La neumonía atípica es contagiosa y se transmite fácilmente a través de gotitas de saliva contaminadas. De esta forma, siempre es importante cubrirse la boca con un pañuelo o mascarilla al estornudar o toser para evitar contaminar a otras personas con cualquier tipo de infección respiratoria.
Debido a que los síntomas de la neumonía atípica pueden tardar varios días en aparecer, es posible que una persona transmita la enfermedad antes de confirmar el diagnóstico, especialmente si comienza con ataques de tos o estornudos. De esta forma, las personas que viven en la misma casa o que están en contacto cercano tienen un mayor riesgo de infectarse y, por este motivo, también deben acudir a un médico para saber si pueden estar infectados e iniciar tratamiento.
Aprenda algunas precauciones importantes para evitar contraer neumonía.
Cómo se realiza el tratamiento
El tratamiento de la neumonía atípica tarda entre 14 y 21 días y se puede realizar en casa con antibióticos como eritromicina, azitromicina o levofloxacina, recetados por un neumólogo o un médico de ambulancia. Debido a que la neumonía atípica es causada por organismos diferentes a la neumonía normal, los antibióticos usados pueden cambiarse una o dos veces durante el tratamiento.
Además, durante el tratamiento se recomienda:
- Realice nebulizaciones de acuerdo con las instrucciones del médico;
- Evite ir al trabajo o la escuela;
- Descanse en casa;
- Cúbrase la boca con un pañuelo o mascarilla para estornudar o toser;
- Beba muchos líquidos, como agua, jugos naturales o té;
- Evite los cambios bruscos de temperatura.
Este cuidado es importante para prevenir la recurrencia o agravamiento de la neumonía, provocando complicaciones como paro respiratorio, encefalitis o miocarditis, por ejemplo.
Signos de empeoramiento de la neumonía atípica
Los signos de que el tratamiento no está funcionando incluyen un aumento de la fiebre por encima de los 40º y un empeoramiento de la dificultad para respirar, que puede provocar una respiración rápida y el movimiento de las alas de la nariz.
Ante los signos de deterioro, es importante acudir al hospital ya que pueden ser necesarias nuevas pruebas, cambio de antibióticos u hospitalización para fisioterapia respiratoria, oxígeno o antibióticos intravenosos.
Signos de mejoría en la neumonía atípica.
Cuando el tratamiento funciona, generalmente hay signos de mejoría, como disminución de la fiebre hasta por 4 días, disminución de la fatiga y mayor alivio de la respiración.
A pesar de los signos de mejoría en la neumonía atípica, el tratamiento farmacológico debe continuarse hasta el final del antibiótico, evitando recaídas o agravamiento de la neumonía.