La hidrolipoclasia, también conocida como liposucción boom o mini liposucción, es una cirugía plástica que se utiliza para eliminar la grasa localizada. Este procedimiento se realiza bajo anestesia local y con la conciencia del paciente durante todo el procedimiento.
Esta cirugía plástica está indicada cuando es necesario remodelar el cuerpo, por lo tanto, no está indicada en casos de obesidad; Además, se puede utilizar en todas las zonas del cuerpo donde exista grasa localizada.
Cómo se realiza el procedimiento
La hidrolipoclasia debe ser realizada por un cirujano plástico que domine la técnica, en una clínica de cirugía estética y bajo anestesia local. El paciente permanece consciente durante todo el procedimiento, pero no puede ver lo que están haciendo los médicos; al igual que ocurre con una cesárea, por ejemplo.
Durante la operación, el médico inyecta un líquido llamado Klein, que se basa en lidocaína, en combinación con otros medicamentos que reducen el sangrado y facilitan la extracción de grasa localizada en el sitio de aspiración. Luego se inserta una cánula, su función es succionar la grasa acumulada. Después de la colocación del microtubo, el médico realizará movimientos de ida y vuelta para eliminar la grasa y acumularla en el sistema de almacenamiento.
Al final de la aspiración de toda la pomada deseada, se realiza la curación y se coloca una banda quirúrgica; luego se lleva a la persona a la habitación para que se recupere. La duración media de la hidrolipoclasia varía de 2 a 2 horas y media.
¿Cómo es la recuperación de la hidrolipoclasia?
Durante el postoperatorio, se recomienda que la persona esté en reposo y sin intentarlo y, dependiendo de cómo progrese la recuperación y la superficie corporal aspirada, el paciente puede volver a sus actividades habituales en un plazo de 3 a 20 días.
Los alimentos deben ser ligeros y ricos en agua, los medicamentos están más indicados como huevos y pescado rico en omega 3. El paciente debe salir del hospital con un cinturón y una venda; y solo se pueden quitar durante el baño, teniendo que volver a colocarlos.
El drenaje linfático manual se puede realizar 1 sesión antes de la cirugía y otra después de la misma, lo cual es muy útil para eliminar el exceso de líquido que se forma después del procedimiento quirúrgico y reducir el riesgo de fibrosis, que son pequeñas áreas endurecidas de la piel; logrando así un resultado más rápido y bonito. A continuación, se indica el drenaje linfático todos los días durante 3 semanas.
6 semanas después de la hidrolipoclasia, no hay necesidad de drenaje linfático manual y la persona puede quitar el vendaje y volver a la actividad física. Aprenda paso a paso cómo realizar el drenaje linfático.
Zonas del cuerpo más indicadas para realizar hidrolipoplasia
Las zonas del cuerpo más indicadas para realizar hidrolipoplasia son: región abdominal, brazos, cara interna de los muslos, papada y alas (grasa localizada en la parte lateral inferior del abdomen y espalda).
¿Cuáles son los riesgos de este procedimiento?
Cuando la hidrolipoplasia es realizada por cirujanos plásticos experimentados, las posibilidades de complicaciones son escasas y no ha habido muertes asociadas con este procedimiento, por lo que puede considerarse una técnica segura.
A pesar de esto, existe el riesgo de que se forme un seroma, es decir, que se acumule líquido (suero) cerca del sitio de la cicatriz; Pueden ser reabsorbidos por el cuerpo o el médico tendrá que extraerlos con una jeringa unos días después de la cirugía. Conozca los factores que promueven la formación de suero y cómo evitarlos.