La mastopatía fibroquística, también llamada displasia mamaria o fibroadenoma de la glándula mamaria, es un trastorno fibroquístico benigno caracterizado por cambios en la mama como dolor, hinchazón, endurecimiento y nódulos que generalmente aumentan en el período premenstrual debido a las hormonas femeninas.
En la mayoría de los casos, la mastopatía fibroquística no requiere tratamiento porque los síntomas mejoran después de la menstruación. Sin embargo, en caso de que los síntomas sean muy desagradables, el médico puede sugerir el uso de analgésicos o antiinflamatorios, además de suplementos de vitamina E en algunos casos.
Principales síntomas
Los síntomas de la mastopatía fibroquística son más comunes en el período premenstrual porque hay un mayor cambio en los niveles hormonales que pueden afectar la mama, lo que resulta en la acumulación de líquido en el tejido mamario y conduce a signos y síntomas. , de los cuales los principales son:
- Dolor de pecho;
- Hinchazón del pecho;
- Endurecimiento del pecho;
- Sensibilidad en el pecho;
- Nódulos mamarios Observa cuándo un bulto en el seno puede ser grave.
La mastopatía fibroquística general ocurre después de la adolescencia, más común en mujeres sin hijos. Durante la lactancia, la mastopatía mejora y puede reaparecer en la menopausia, especialmente si la mujer no se somete a un reemplazo hormonal.
¿Puede la mastopatía fibroquística convertirse en cáncer?
La mastopatía fibroquística no conduce a cáncer porque se caracteriza por cambios causados por la acumulación de líquido en el tejido mamario que resultan en signos y síntomas inflamatorios, sin cambios celulares que puedan aumentar el riesgo de cáncer.
Sin embargo, ante la presencia de nódulos mamarios identificados durante el autoexamen, es importante consultar a un ginecólogo o mamólogo para una evaluación más detallada y determinar las características de este nódulo y así concluir si es benigno o no. Vea cuándo un bulto en el pecho puede ser grave.
Tratamiento de la mastopatía fibroquística
La mastopatía fibroquística no es una enfermedad, por lo que no existe tratamiento. Sin embargo, los síntomas pueden ser bastante desagradables, por lo que el ginecólogo puede sugerir el uso de hormonas, analgésicos y antiinflamatorios como el paracetamol o el ibuprofeno, que ayudan a aliviar los síntomas. En el caso de nódulos grandes, el médico también puede succionar el contenido del nódulo, lo que también puede promover el alivio de los síntomas.
Además, el ginecólogo puede prescribir un suplemento de vitamina E como complemento del tratamiento, ya que esta vitamina ayuda en la producción y equilibrio de las hormonas femeninas. Por otro lado, las mujeres también pueden incrementar su consumo de alimentos ricos en vitamina E como el aceite de germen de trigo, las semillas de girasol o las avellanas, por ejemplo.
Para aliviar el dolor y los síntomas, las mujeres deben evitar los alimentos con sal y cafeína, como café, chocolate, té y refrescos. Aumente la ingesta de líquidos y use sujetadores sueltos que sujeten mejor sus senos.