Los mejores remedios caseros para aliviar el dolor de oído

Algunos remedios caseros, como usar una barra de jengibre o aplicar unas gotas de aceite de ajo, son muy buenos remedios caseros para reducir el dolor de oído, especialmente mientras espera una visita al otorrinolaringólogo.

Varios de estos fármacos tienen propiedades antibióticas y antiinflamatorias, pero no sustituyen el uso de fármacos recomendados por un médico, especialmente cuando existe algún tipo de infección.

Experimentar con estos medicamentos o seguir otros sencillos consejos puede ser suficiente para acabar con el dolor o reducir el malestar hasta que vea a un médico. Obtenga más consejos para tratar el dolor de oído.

1. Palito de jengibre

El jengibre es una raíz que tiene increíbles propiedades antiinflamatorias y analgésicas que ayudan a aliviar varios tipos de dolor, incluido el dolor de oído.

Para usar jengibre, corte un palito a 2 cm de la raíz de jengibre, haga pequeños cortes en el costado y colóquelo en la oreja durante unos 10 minutos. Conozca los otros beneficios para la salud del jengibre.

2. Inhalación de vapor de manzanilla

La manzanilla tiene un fuerte efecto relajante y descongestionante que facilita la descarga de las secreciones de la nariz y el oído, reduciendo la presión y aliviando el dolor. Además, el vapor ayuda a hidratar los conductos que conectan la nariz al oído, reduciendo la irritación que puede causar dolor.

Para hacer esta inhalación, se deben colocar unas gotas de aceite esencial de manzanilla en un balde de agua hirviendo, luego se coloca una toalla sobre la cabeza e inhalar el vapor. También es posible utilizar dos puños de la planta seca o unas hojas de eucalipto.

3. Aceite de ajo

Además de ser un antibiótico, el ajo es un potente analgésico que puede usarse para aliviar una variedad de dolores corporales, incluido el dolor de oído. Sin embargo, el hábito de aplicar aceite caliente o cualquier otra solución distinta a la prescrita por un otorrinolaringólogo debe ejercerse con precaución ya que puede agravar el dolor o provocar quemaduras.

Para utilizar su poder analgésico, machaca un diente de ajo y colócalo en un bol pequeño con 2 cucharadas de aceite de sésamo. Luego, el recipiente se coloca en el microondas durante 2 a 3 minutos. Luego, la mezcla debe filtrarse y aplicarse de 2 a 3 gotas en el oído adolorido.

Cuando ver a un doctor

Si los síntomas persisten o empeoran, se recomienda que consulte a un médico, especialmente para un bebé o un niño pequeño. La fiebre es un signo alarmante, por lo que en algunos casos el pediatra puede sugerir el uso de antibióticos, analgésicos y antiinflamatorios para controlar el dolor.

El médico controlará la apariencia dentro del oído con un pequeño dispositivo, esto ayudará a determinar la gravedad de la situación y si el tímpano está involucrado o si su membrana se ha roto. Además, también podrás identificar si hay pus u otras complicaciones para determinar el tratamiento a seguir.

Deja un comentario