Un hidrocele es una acumulación de líquido en el escroto que rodea al testículo, lo que puede provocar un aumento de volumen o un testículo más grande que el otro. Aunque es un problema más común en los bebés, también puede ocurrir en hombres adultos, especialmente después de los 40 años.
Habitualmente, el hidrocele no provoca dolor u otros síntomas distintos a un aumento del volumen testicular y, por ello, no provoca lesiones en el mismo ni afecta a la fertilidad, desapareciendo de forma espontánea, principalmente en los lactantes, casi siempre sin necesidad de tratamiento. Si experimenta dolor testicular, averigüe qué puede causarlo.
Debido a que la hinchazón también puede ser signo de enfermedades más graves, como el cáncer, siempre es recomendable consultar a un pediatra en bebés o un urólogo en hombres para confirmar el diagnóstico de hidrocele.
Razones principales
En los hombres adultos, el hidrocele ocurre normalmente porque el canal a través del cual descienden los testículos durante el embarazo no está completamente cerrado y el líquido del abdomen pasa al escroto, provocando un aumento de volumen en el área genital. Sin embargo, también puede ocurrir por orquitis, epididimitis, hernia inguinal, traumatismo o filariasis.
Por otro lado, el hidrocele en el bebé ocurre porque durante el embarazo los testículos tienen una bolsa de líquido a su alrededor, pero ese saco se cierra en el primer año de vida y el líquido es absorbido por el cuerpo. Sin embargo, cuando esto no sucede, la bolsa puede continuar acumulando líquido y generar un hidrocele.
Características del hidrocele
Para estar seguro de que realmente se trata de un hidrocele, el único signo que debe estar presente es un aumento de volumen, que puede afectar a uno o dos testículos.
El médico observará y palpará la región íntima para confirmar que no hay signos de dolor o cualquier otro cambio que indique que puede tratarse de otra enfermedad. Sin embargo, la ecografía del saco escroto es la forma más segura de averiguar si realmente se trata de un hidrocele. La ecografía testicular es la mejor manera de averiguar si realmente se trata de un hidrocele.
Cómo se realiza el tratamiento
En la mayoría de los casos, el hidrocele en el bebé no necesita un tratamiento específico y desaparece por sí solo al año. En el caso de varones adultos, puede estar indicado esperar 6 meses para confirmar si el líquido se reabsorbe espontáneamente y desaparece.
Sin embargo, cuando esto causa mucha incomodidad o aumenta progresivamente de tamaño con el tiempo, su médico puede recomendar una pequeña operación con anestesia espinal para eliminar el hidrocele del escroto.
Este tipo de cirugía es bastante simple y se puede realizar en pocos minutos, por lo tanto, la recuperación es rápida, es posible regresar a casa a las pocas horas de la operación, en el momento en que el efecto de la anestesia desaparece por completo.
Otra forma de tratamiento menos utilizada con un mayor riesgo de complicaciones y recurrencia es la aspiración bajo anestesia local.