La ecografía 3D o 4D son pruebas de imagen que se pueden realizar durante una consulta prenatal entre las 26 y 29 semanas de embarazo y se utilizan para ver los detalles físicos del bebé y para evaluar la presencia y gravedad de la enfermedad, no solo para reducir curiosidad de los padres.
El examen 3D muestra detalles del cuerpo del bebé, lo que permite una visión más clara del rostro y los genitales, mientras que el examen 3D, además de rasgos bien definidos, permite visualizar los movimientos del feto en el útero materno.
Se recomienda no usar humectantes para el estómago y beber muchos líquidos el día anterior al examen.
Ultrasonido 3D
Cuando hacerlas
El mejor momento para hacer una ecografía 3D y 4D es entre las 26 y 29 semanas de gestación, porque en estas semanas el bebé ya ha crecido y todavía hay suficiente líquido amniótico en el útero materno.
Antes de este período, el feto todavía es muy pequeño y tiene un poco de grasa debajo de la piel, lo que dificulta ver sus rasgos, y después de las 30 semanas el bebé ya es muy grande y ocupa mucho espacio, lo que lo hace difícil. para ver. su rostro y sus movimientos. Descubra con más detalle cuántos meses comienza a moverse el bebé en el útero de la madre.
Enfermedades identificadas por ultrasonido
Generalmente, la ecografía 3D y 4D identifica las mismas enfermedades que la ecografía convencional, por lo que generalmente no están cubiertas por los planes de salud. Los principales cambios detectados por ecografía son:
- Labio leporino, que es una malformación del paladar;
- Defectos en la columna vertebral del bebé;
- Malformaciones cerebrales, como hidrocefalia o anencefalia;
- Malformaciones en las extremidades, riñones, corazón, pulmones e intestinos;
- Síndrome de Down.
La ventaja de los exámenes 3D o 4D es que brindan una mejor evaluación de la gravedad del problema y se pueden realizar después del diagnóstico con ultrasonido convencional. Además, en la mayoría de los casos se utiliza la ecografía morfológica, que forma parte de los exámenes prenatales que se deben realizar para identificar enfermedades y malformaciones en el bebé. Obtenga más información sobre la ecografía estructural o morfológica y cuándo debe realizarse.
¿En qué situaciones la imagen no puede ser buena?
Algunas situaciones pueden confundirse con imágenes de ultrasonido 3D o 4D, como la posición del bebé, que puede estar de espaldas a la madre, impidiendo que el médico identifique su rostro o el hecho de que el bebé pueda tener extremidades. O cordón umbilical. la cara.
Además, una pequeña cantidad de líquido amniótico o un exceso de grasa en el abdomen de la madre pueden interferir con la imagen. Esto se debe a que el exceso de grasa dificulta que las ondas que forman la imagen pasen por el dispositivo de ultrasonido, por lo que las imágenes formadas no reflejan la realidad o tienen una buena resolución.
Es importante recordar que el examen comienza con una ecografía normal, porque la ecografía 3D / 4D se realiza solo cuando se obtienen buenas imágenes en un examen convencional.