La diarrea crónica es aquella en la que hay un aumento en el número de deposiciones por día y el ablandamiento de las heces dura un período mayor o igual a 4 semanas y, que puede ser causada por infecciones microbianas, intolerancia alimentaria, inflamación intestinal. o uso de drogas.
Para identificar la causa de la diarrea crónica y comenzar el tratamiento adecuado, la persona debe consultar a un gastroenterólogo o médico general para evaluar los síntomas y buscar pruebas que puedan ayudar a identificar la causa, un examen de heces generalmente indicado, una colonoscopia y un análisis de sangre.
La diarrea crónica se origina como consecuencia de una irritación en el sistema gastrointestinal que puede tener diversas causas, siendo las principales:
1. Intolerancia o alergias alimentarias
Algunas intolerancias, como la lactosa o el gluten, o una alergia a las proteínas de la leche, pueden provocar irritación e inflamación de los intestinos y provocar diarreas crónicas, ya que el diagnóstico de este tipo de afecciones suele llevar algún tiempo. Además, dependiendo de la causa, pueden aparecer otros síntomas asociados con la diarrea.
Hacer: Se debe consultar a un gastroenterólogo para evaluar los síntomas y solicitar pruebas como un análisis de sangre, anticuerpos IgE o antigliadina, pruebas cutáneas y pruebas de heces. Además, se pueden sugerir pruebas de provocación oral, que consisten en ingerir alimentos sospechosos de intolerancia o alergia y luego monitorear cualquier síntoma.
2. Infecciones intestinales
Algunas infecciones intestinales causadas por parásitos como giardiasis, amebiasis o ascariasis; por lo tanto, al igual que las infecciones por bacterias y virus (principalmente rotavirus), pueden causar diarrea crónica cuando no se detectan rápidamente. Generalmente, las infecciones intestinales suelen ocasionar otros síntomas como dolor abdominal, flatulencia, fiebre, vómitos, entre otros.
Hacer: El tratamiento de las infecciones intestinales generalmente consiste en reposo, bien hidratado con suero casero o suero oral para rehidratación y seguimiento de una dieta de fácil digestión. Sin embargo, dependiendo de la causa, su médico puede sugerir el uso de medicamentos para su tratamiento, que pueden incluir el uso de antiparasitarios o antibióticos.
Por este motivo, si los síntomas persisten durante más de 3 días o si hay fiebre o presencia de sangre en las heces, se debe consultar a un médico de cabecera o gastroenterólogo para valorar los síntomas y sugerir el tratamiento más adecuado. Consulte el tratamiento para las infecciones intestinales con más detalle.
En el siguiente video puedes ver cómo preparar el suero casero:
Síndrome del intestino irritable
El síndrome del intestino irritable es una enfermedad en la que se produce la inflamación de las vellosidades intestinales, lo que puede provocar diarrea crónica, exceso de gases, dolor abdominal e inflamación. Estos síntomas varían en intensidad y pueden aparecer de un momento a otro, durar un tiempo y desaparecer repentinamente.
Hacer: En estos casos, es importante acudir a un gastroenterólogo para diagnosticar la enfermedad observando los síntomas y sugiriendo algunas pruebas como colonoscopia, tomografía computarizada y una prueba de heces. Generalmente, el tratamiento consiste en seguir una dieta específica baja en grasas y azúcar y, en algunos casos, su médico puede sugerir algunos medicamentos.
Conoce en qué consiste el tratamiento.
4. Uso de ciertos medicamentos
Existen algunos fármacos que pueden alterar la flora bacteriana, la motilidad intestinal y / o las vellosidades intestinales, provocando un efecto laxante y provocando diarrea como efecto secundario; o que cuando se toman en exceso, pueden provocar este tipo de trastorno gastrointestinal al provocar toxicidad.
Algunos de estos medicamentos son antibióticos, ciertos antidepresivos, medicamentos contra el cáncer, antiácidos e inhibidores de la bomba de protones como omeprazol o lansoprazol, entre otros.
Hacer: En el caso de los antibióticos, la mejor forma de combatir la diarrea es tomando probióticos, un suplemento que se puede comprar en una farmacia y que contiene bacterias que regulan la función intestinal. En cuanto a otros medicamentos, lo mejor es consultar al médico que los recetó e informarle de este efecto secundario; Mientras tanto, seguir una dieta fácilmente digerible y mantenerse hidratado es muy importante para mejorar la diarrea.
5. Enfermedades intestinales
Las enfermedades intestinales, como la enfermedad de Crohn, la colitis ulcerosa, la enteritis o la enfermedad celíaca, también pueden causar diarrea crónica porque provocan una inflamación crónica en el intestino que causa estos y otros síntomas acompañantes, según la enfermedad presente.
Hacer: En estos casos, se recomienda acudir a un gastroenterólogo para su evaluación y realizar pruebas diagnósticas para identificar la enfermedad y prescribir el tratamiento más adecuado. Además, una vez realizado el diagnóstico conviene acudir a un nutricionista ya que la dieta juega un papel fundamental en el alivio de los síntomas asociados a este tipo de enfermedades.
6. Enfermedades del páncreas
En enfermedades del páncreas como insuficiencia pancreática, pancreatitis crónica o en casos de cáncer de páncreas, este órgano tiene dificultad para producir o transportar suficientes enzimas digestivas para permitir que los alimentos sean digeridos en los intestinos y posteriormente absorbidos. Esto provoca cambios principalmente en la absorción de grasas, provocando una diarrea crónica con determinadas características por ser hinchada, brillante y con contenido graso.
Hacer: En estos casos es importante acudir a un nutricionista para desarrollar un plan de nutrición a la medida de la condición de la persona, este mejorará la absorción de nutrientes, evitará la pérdida de peso y la posible desnutrición y aliviará las molestias que suelen ocasionar estas enfermedades.
Además, puede ser necesaria la suplementación con ciertas vitaminas y minerales, cuya absorción se ve afectada por la frecuencia de las deposiciones líquidas; además de recetarle pancreatina por un médico, que es un fármaco que reemplaza las enzimas digestivas y ayuda a mejorar la digestión y absorción de los alimentos, mejorando así la diarrea.
7. Fibrosis quística
Existen algunas enfermedades genéticas que pueden alterar el tejido del tracto digestivo, como la fibrosis quística, enfermedad que afecta a la producción de secreciones en diversos órganos, principalmente en los pulmones e intestinos, haciéndolos muy espesos y viscosos, lo que puede causar crónicas diarrea alternando con estreñimiento. Además, pueden presentarse otros síntomas acompañantes como dificultad para respirar, tos persistente, infecciones pulmonares frecuentes, heces grasas e incómodas, indigestión, pérdida de peso, entre otros.
Hacer: Esta enfermedad genética generalmente se detecta al nacer mediante una prueba de detección neonatal, pero puede detectarse mediante otras pruebas genéticas que identifican la mutación responsable de la enfermedad. El tratamiento de la fibrosis quística se suele realizar mediante la ingesta de fármacos recetados por un médico, fisioterapia respiratoria y soporte nutricional para controlar la enfermedad y mejorar la calidad de vida de la persona.
8. Cáncer de intestino
El cáncer de intestino puede causar síntomas como diarrea frecuente, pérdida de peso, dolor abdominal, fatiga y la presencia de sangre en las heces y puede variar según la ubicación del cáncer y su gravedad. Vea cuáles son los signos y síntomas del cáncer de colon.
Hacer: Si una persona tiene estos síntomas durante más de 1 mes, tiene más de 50 años o antecedentes familiares de cáncer de intestino, debe acudir a un gastroenterólogo. Su médico evaluará sus síntomas y puede ordenar pruebas de diagnóstico, como una prueba de heces, una colonoscopia y / o una tomografía computarizada, para identificar el problema y comenzar el tratamiento adecuado lo antes posible.
Como se hace el tratamiento
Para tratar la diarrea crónica, su médico puede sugerir inicialmente formas de prevenir la deshidratación o desnutrición proporcionando pautas para aumentar la ingesta de líquidos y la alimentación diaria. A continuación, se administra un tratamiento definitivo según la causa de la diarrea, que puede incluir el uso de fármacos como antibióticos o fármacos para tratar infecciones, eliminación de laxantes o fármacos antiinflamatorios para enfermedades autoinmunes, por ejemplo.
Que comer en caso de diarrea crónica.
Cuando tenga diarrea crónica, es importante consultar a un nutricionista, ya que no solo ajustará la dieta a la enfermedad subyacente, sino que también evaluará la necesidad de suplementos dietéticos para ayudar a mantener o recuperar el peso, así como la ingesta de vitaminas y minerales, si es necesario.
Sin embargo, la dieta debe ser fácil de digerir y absorber y puede incluir:
- Sopas y purés de verduras cocidas que no estimulan los intestinos como calabacín, zanahoria, calabacín, té, patatas, boniatos;
- Plátanos verdes y frutas hervidas o tostadas como manzana, melocotón o pera;
- Atolón de arroz o maíz;
- arroz cocido;
- Carnes blancas hervidas o asadas como pollo o pavo;
- Pescado cocido o a la plancha.
Adicionalmente, es necesario beber unos 2 litros de líquidos al día, como agua, té, agua de coco o zumos de frutas exprimidos, y beber suero casero o sueros de rehidratación oral que se pueden adquirir en farmacias. Estos sérums deben tomarse inmediatamente después de cada evacuación, más o menos la misma cantidad en la que se pierden líquidos, evitando así la pérdida de minerales y la deshidratación.
En el siguiente video, mira los consejos de nuestra nutricionista, qué comer en caso de diarrea: