El vómito es el reflejo natural del organismo para eliminar los alimentos en mal estado o las sustancias tóxicas que se pueden encontrar en el estómago y por tanto, cuando realmente se necesita, el organismo provoca automáticamente el vómito. De esta forma, los vómitos deben producirse únicamente cuando exista una indicación médica o al ingerir algo que provoque un malestar muy intenso, que de otra forma no ha mejorado.
En situaciones en las que alguien ha ingerido una sustancia venenosa o algún tipo de líquido irritante, como un limpiador, lo ideal es no inducir el vómito, ya que ese líquido tendrá que ser devuelto a la garganta, potencialmente causando más daño. Idealmente, en estas situaciones deberías acudir al hospital de inmediato para comenzar el tratamiento más adecuado. Sepa qué hacer en caso de intoxicación.
En caso de que te encuentres en una situación en la que sea necesario vomitar, consulta a continuación los pasos que debes seguir para realizar esta acción de forma segura y evitar complicaciones por una mala técnica:
5 pasos para inducir adecuadamente el vómito
Para inducir adecuadamente el vómito y evitar molestias o complicaciones muy graves, debe:
1. Lávese bien las manos
El lavado de manos siempre es muy importante, ya que evita la transmisión de bacterias y otros microorganismos en la garganta, previniendo la aparición de infecciones como la amigdalitis, por ejemplo.
2. Arrodíllate frente al baño
Arrodillarse frente al inodoro es una de las posturas más seguras y cómodas para vomitar, pero aún así debe evitar ejercer demasiada presión sobre el estómago, ya que esto puede causar aún más molestias.
3. Pon tu dedo en tu garganta
Hay un punto al comienzo de la garganta que se puede apretar para producir la necesidad de vomitar. Para hacer esto, debes poner tu dedo en tu boca y luego aplicar una ligera presión en la parte de atrás de tu lengua, en el área donde comienza la garganta. La necesidad de vomitar es casi instantánea, sin embargo, algunas personas pueden necesitar hacer esta maniobra 2 o 3 veces antes de vomitar con éxito, ya que el cuerpo puede intentar bloquear la señal las primeras veces.
4. Beba 1 vaso de agua
Después de vomitar es muy importante beber un vaso de agua para eliminar el exceso de ácido del estómago que queda en las paredes de la garganta y que puede provocar pequeñas quemaduras e inflamación.
5. Espere 30 minutos antes de cepillarse los dientes.
Aunque existe una gran necesidad de eliminar el sabor que queda en la boca tras el vómito, lo mejor es balancearlo con agua, porque la mucosa dental es sensible cuando entra en contacto con el contenido del estómago. Por lo tanto, debes esperar al menos 30 minutos antes de cepillarte los dientes.
Posibles riesgos de provocar vómitos
Uno de los mayores riesgos de los vómitos es la posibilidad de desarrollar neumonía. Esto se debe a que cuando el contenido del estómago se devuelve a la boca y, en el proceso, parte de ese contenido puede ser succionado hacia los pulmones. Si esto sucede, causará inflamación y las bacterias en los alimentos digeridos pueden crecer hacia los pulmones, causando neumonía.
Sin embargo, los vómitos frecuentes también pueden causar lesiones en el esófago, como perforación, y en la boca, ya que son áreas con membranas mucosas muy sensibles que no están listas para entrar en contacto directo con el ácido gástrico.
Que puede provocar vómitos
Hay situaciones en las que las ganas de vomitar es un signo asociado a cambios en el organismo, provocan el efecto de vomitar de forma involuntaria, como por ejemplo:
- Emergencias abdominales: como apendicitis u obstrucción intestinal;
- Cambios en el tracto digestivo: intoxicación alimentaria, úlcera péptica;
- Cambios en el sistema nervioso central: tumores, meningitis, hidrocefalia;
- El embarazo: son comunes por la mañana, y este es uno de los síntomas más comunes del embarazo, suelen aparecer después de la sexta semana de gestación y pueden durar todo el embarazo;
- Medicamentos: algunos de ellos tienen un efecto negativo sobre los vómitos como: antiinflamatorios no esteroideos, digoxina, codeína, colchicina, teofilina, así como los relacionados con la quimioterapia como cisplatino, dacarbazina y mostaza nitrogenada.
Aunque existen algunas situaciones en las que se puede inducir el vómito sin mucho riesgo, en caso de que las ganas de vomitar se presenten con mucha frecuencia y no mejoren o se acompañen de otros signos como vómitos de sangre o un olor desagradable, es importante entrar un hospital para evaluar la situación. Vea cuáles son las principales causas de los vómitos.
Cuando no debes inducir el vómito
El vómito nunca debe usarse como una forma de empujar la comida ingerida del estómago solo porque se ha comido demasiado. Si esto sucede con frecuencia, es posible que padezca bulimia, un trastorno alimentario en el que una persona vomita después de comer para evitar aumentar de peso. Obtenga más información sobre los principales trastornos alimentarios.
Además, si se inyecta un limpiador, no debe vomitar, ya que existe un riesgo muy alto de causar quemaduras tanto en el estómago como en el esófago. No se recomienda la inducción del vómito en niños sin la supervisión de un adulto o en personas que padecen trastornos psicológicos, como anorexia o bulimia.