Un aumento en el número de basófilos se llama basofilia e indica que hay principalmente un proceso inflamatorio o alérgico en el cuerpo y es importante que la concentración de basófilos en la sangre se interprete junto con otros resultados hematológicos. .
No es necesario tratar los basófilos elevados, pero sí la causa de la basofilia. Por este motivo, es importante investigar la causa del aumento y así comenzar el tratamiento adecuado.
Los basófilos son células que pertenecen al sistema inmunológico y se encuentran en cantidades menores en la sangre, y se consideran normales cuando su concentración está entre 0 y 2% o 0-200 / mm3, o según valor de laboratorio. Los valores de basófilos superiores a 200 / mm3 son indicativos de basofilia. Obtenga más información sobre los basófilos.
Las principales causas de la basofilia son:
1. Asma, sinusitis y rinitis
El asma, la sinusitis y la rinitis son las principales causas de elevación de basófilos, ya que son responsables de procesos alérgicos o inflamatorios intensos y de larga duración, que estimulan una mayor actividad del sistema inmunológico, provocando un aumento no solo de basófilos sino también de eosinófilos. y linfocitos.
Hacer: En estas situaciones, es importante identificar la causa de la sinusitis y la rinitis y evitar el contacto, y se pueden usar antihistamínicos para aliviar los síntomas. En el caso del asma, además de evitar la causa responsable de la aparición de los síntomas, está indicado el uso de fármacos que estimulen la apertura de los bronquios pulmonares, facilitando la respiración.
2. Colitis ulcerosa o ulcerosa
La colitis ulcerosa es una enfermedad inflamatoria intestinal, que se caracteriza por la presencia de diversas úlceras en los intestinos, provocando muchas molestias, fatiga y pérdida de peso, por ejemplo. Debido a que es un proceso inflamatorio prolongado, es posible confirmar el aumento del número de basófilos en el recuento sanguíneo.
Hacer: Es importante seguir el tratamiento según las indicaciones de su gastroenterólogo, dando preferencia a una dieta saludable y baja en grasas, además de algunos medicamentos que ayudan a reducir la inflamación, como sulfasalazina, mesalazina y corticosteroides, por ejemplo.
3. Artritis
La artritis se caracteriza por la inflamación de las articulaciones, lo que conduce a cambios en la hematología, incluido un aumento en el número de basófilos.
Hacer: En caso de artritis, es importante que el tratamiento se realice según las indicaciones del traumatólogo, de esta forma, además de normalizar los valores hematológicos, es posible suprimir los síntomas relacionados con la artritis. Ver todo sobre la artritis.
4. Insuficiencia renal crónica
Es común que en la insuficiencia renal crónica se observe un aumento en el número de basófilos, ya que esto normalmente se asocia a un proceso inflamatorio prolongado.
Hacer: En este caso, se recomienda seguir el tratamiento prescrito por el médico para el tratamiento de la insuficiencia renal, en el que generalmente está indicado el uso de fármacos para controlar los síntomas o en situaciones más graves puede estar indicado un trasplante de riñón.
5. Anemia hemolítica
La anemia hemolítica se caracteriza por la destrucción de los glóbulos rojos por el propio sistema inmunológico, dando lugar a síntomas como debilidad, palidez y pérdida del apetito, por ejemplo. Para intentar compensar la destrucción de los glóbulos rojos, la médula ósea comienza a liberar más células inmaduras al torrente sanguíneo, como los reticulocitos. Además, en algunos casos, el médico puede notar un aumento en la cantidad de basófilos, porque el sistema inmunológico está más activo.
Hacer: Es importante someterse a pruebas hematológicas y de laboratorio para confirmar que se trata de anemia hemolítica y no de otro tipo de anemia. En situaciones en las que se haya confirmado anemia hemolítica, su médico puede recomendar el uso de medicamentos que regulen la actividad del sistema inmunológico, como prednisona y ciclosporina, por ejemplo.
Vea cómo identificar y tratar la anemia hemolítica.
6. Enfermedades de la sangre
Algunos trastornos hematológicos, principalmente leucemia mieloide crónica, policitemia vera, trombocitemia esencial y mielofibrosis primaria, por ejemplo, pueden provocar un aumento de los recuentos de basófilos en sangre, entre otros cambios hematológicos.
Hacer: En estos casos, es importante que el diagnóstico lo realice un hematólogo en base a los resultados del hemograma y otras pruebas de laboratorio, para que se pueda iniciar el tratamiento más adecuado de la enfermedad hematológica.