Se considera que el bebé tiene bajo peso al nacer cuando pesa menos de 2,5 kg, y el motivo principal es el nacimiento prematuro y / o la baja edad gestacional. La alimentación en estas situaciones juega un papel fundamental ya que ayuda a mantener sano al bebé, reduciendo el riesgo de complicaciones y desnutrición.
Es normal que un bebé de bajo peso al nacer no siga la curva de crecimiento normal, generalmente en el primer año de vida, esto no significa que el bebé tenga un problema de salud, siempre y cuando el crecimiento sea siempre positivo. Lo ideal en esta situación es acudir a un nutricionista, pues cada caso debe ser evaluado individualmente y merece un seguimiento, pues además de la lactancia materna, puede ser necesaria la suplementación adicional de vitaminas y minerales.
Para saber si su bebé tiene el peso adecuado para su edad, busque el peso ideal para las niñas o el peso ideal para los niños.
1. Alimente a su bebé a la ligera
Es recomendable alimentar al recién nacido hasta los 6 meses con lactancia materna exclusiva, siempre que sea posible, incluso se puede utilizar leche materna de donante para alimentar al bebé, es una alternativa segura siempre que se haga en bancos. de leche.
En caso de que el bebé no suba de peso de forma positiva, es importante comprobar si la técnica de lactancia materna se utiliza correctamente, se debe consultar a un médico y / o nutricionista para que le ayude y, en caso de ser necesario, se les podría nombrar como refuerzos. De hombre. leche, que ayudaría a mejorar el crecimiento y el aumento de peso, al tiempo que preservaría los beneficios inmunológicos y metabólicos de la leche.
En caso de que el uso de la lactancia materna no sea posible, el bebé puede ser alimentado con leche artificial especial para su condición, la cual debe ser indicada por el pediatra o nutricionista. Vea más sobre alimentación artificial.
2. Alimentar al bebé después de los 6 meses
La alimentación complementaria comienza a los 6 meses de edad, y si el bebé continúa con bajo peso para esa edad o ha perdido peso como resultado de una enfermedad, es importante mantener la lactancia materna según sea necesario o continuar ordeñando entre 6 y 8 onzas, 4 a 6 veces al día y poco a poco ingresa a la comida.
Lo ideal es comenzar a comer frutas molidas como plátanos, peras o manzanas, por ejemplo, a las que puedes agregar de 1 a 2 cucharadas de leche materna o artificial para aumentar tu ingesta calórica. Una vez que se toleran las frutas, se pueden incluir verduras y tubérculos cocidos como calabaza, zanahoria, coliflor y boniato ya que tienen un sabor agradable, por lo que los bebés no suelen rechazarlos y aportan calorías y nutrientes que son importantes para su crecimiento.
Además, para que las comidas sean más nutritivas, el menú puede incluir avena, crema de arroz y maicena o papilla fortificada, que se puede preparar con leche materna o fórmula infantil. También es posible agregar 1 cucharadita de aceite a las comidas o sopas para aumentar la ingesta de calorías. A partir de los 7 meses ya se pueden incluir otros alimentos como carnes y frijoles (batido).
Recomendaciones para la alimentación del bebé.
Es importante respetar las necesidades de hambre y placer del niño, animándolo a comer sin forzarlo; en caso de que el niño rechace la comida, debe probar diferentes combinaciones, sabores, texturas y métodos para animarlo a comer. Además, puedes intentar minimizar las distracciones, hablar con él y mantener el contacto visual.
En cuanto a la cantidad, debes comenzar con porciones pequeñas e ir aumentando gradualmente a medida que tu bebé crece, manteniendo la lactancia. Suele comenzar con 2 cucharaditas, acostumbrándose al sabor, se ofrecen 3 cucharadas en cada comida (si acepta más, aumente la cantidad). A partir de los 7 meses, se calcula aproximadamente 1/2 plato de bebé.
Las necesidades del niño variarán en función del volumen de leche materna consumida, la tasa de crecimiento, el consumo de energía, la presencia y frecuencia de enfermedades agudas o crónicas que requieran diferentes necesidades energéticas. Consulte más información sobre cómo alimentar a su bebé de 0 a 12 meses.