La alergia solar es una reacción exagerada del sistema inmunológico a los rayos solares, provocando una reacción inflamatoria en las zonas más expuestas al sol como manos, brazos, escote y cara, provocando síntomas como enrojecimiento, picor y bolitas blancas o rojizas. en la piel. En casos más graves y raros, esta reacción puede ocurrir incluso en la piel cubierta por la ropa.
Aunque aún no se conoce la causa de esta alergia, puede ocurrir porque el cuerpo reconoce los cambios en la piel inducidos por el sol como algo «extraño», que provoca una reacción inflamatoria.
Esta alergia ocurre cuando se expone a la luz solar y se puede prevenir o aliviar usando un protector solar para proteger la piel. El tratamiento de este tipo de alergia se realiza generalmente con el uso de antihistamínicos los cuales deben ser recetados por un dermatólogo.
Principales síntomas
Los síntomas de una alergia al sol pueden variar de persona a persona, ya que dependen de la sensibilidad de su sistema inmunológico, pero los signos y síntomas más comunes son:
- Enrojecimiento de la piel;
- Manchas rojas en la piel;
- Ampollas o manchas rojas en la piel;
- Picazón en la región de la piel;
- Irritación y sensibilidad en áreas expuestas al sol;
- Sensación de ardor en la piel.
En algunos casos, se pueden formar ampollas con líquido transparente en el interior, y estos síntomas de alergia son más comunes en personas de piel clara o en aquellas tratadas con protectores solares como Dipiron o Tetraciclina, por ejemplo.
Estos síntomas pueden ocurrir a los pocos minutos de la exposición al sol, pero dependerán de la sensibilidad de cada persona. Descubra otras causas de manchas rojas en la piel.
Cómo confirmar el diagnóstico
El diagnóstico de alergia solar debe ser realizado por un dermatólogo mediante la evaluación de los signos, síntomas y antecedentes personales del individuo. Sin embargo, su médico puede ordenar otras pruebas más específicas, como un análisis de sangre o una biopsia de piel, donde se extrae un pequeño trozo de piel y se evalúa en un laboratorio.
Muchas veces, un médico puede sospechar de otras enfermedades, como el lupus, antes de confirmar una alergia al sol, por lo que el diagnóstico puede llevar un tiempo.
¿Quién está más en riesgo?
Aunque las alergias al sol pueden afectar a cualquier persona, existe un mayor riesgo cuando una persona:
- Su piel es muy clara y sensible;
- Utilice productos químicos para la piel, como perfumes o repelentes;
- Tratado con protectores solares como Dipiron o Tetraciclina;
- Tiene otras afecciones de la piel, como dermatitis o psoriasis;
Además, las personas con antecedentes familiares de alergia al sol también tienen más probabilidades de desarrollar cambios en la piel después de la exposición al sol.
Qué hacer en caso de alergia al sol
En caso de una reacción alérgica al sol, se recomienda aplicar agua fría en la zona y mantenerla protegida del sol para reducir la inflamación. Sin embargo, en los casos más severos, cuando hay un picor intenso y enrojecimiento en todo el cuerpo, se debe acudir de inmediato al hospital y consultar con un dermatólogo para evaluar e iniciar el tratamiento más adecuado, que puede incluir el uso de antihistamínicos o corticoides, por ejemplo.
Cómo se realiza el tratamiento
El tratamiento de las alergias solares debe comenzar con algunas técnicas que eviten la exposición prolongada al sol, como usar protector solar o llevar ropa que cubra la mayor parte de la piel, por ejemplo.
Sin embargo, si los síntomas persisten, su dermatólogo puede recetar antihistamínicos como Loratadine o Allegra o corticosteroides, como betametasona, para aliviar los síntomas de alergia durante un ataque, o para usarlos con frecuencia según corresponda.
Además, cuando hay mucho picor y enrojecimiento de la piel, puede estar indicado el uso de pomadas o cremas antihistamínicas que ayuden a aliviar rápidamente los síntomas.
Cómo proteger tu piel cuando tienes alergia al sol
La alergia al sol es un problema que no tiene cura, pero hay algunos consejos que pueden ayudar a proteger la piel y aliviar síntomas como:
- Evite la exposición prolongada al sol e ir a lugares con mucha sombra, tratando de mantenerse alejado del sol el mayor tiempo posible;
- Aplicar protector solar en la piel con un factor de protección de 30 SP como mínimo, antes de salir de casa;
- Use lápiz labial humectante con SPF 30 o mas alto;
- Evite la exposición al sol en las horas más calurosas, entre las 10 y las 16 horas, porque durante este período los rayos del sol son más intensos;
- Use ropa que proteja del sol, prefiriendo el uso de camisas y pantalones sin mangas. En verano este tipo de ropa debe estar confeccionada con tela natural, de color brillante y claro.
- Use sombreros o gorras, así como anteojos de sol, para proteger la cabeza y los ojos de los rayos solares.
Además, cuando se presentan síntomas de alergia, tomar un baño frío para aliviar la picazón y el enrojecimiento también es una buena opción, y aplicar un humectante de aloe vera ayuda a calmar la piel.
Posibles causas de alergia al sol
En muchos casos, la alergia al sol se produce debido a la predisposición genética de una persona a reaccionar de forma exagerada al contacto de los rayos ultravioleta con la piel. Sin embargo, existen otros casos en los que el uso de determinados medicamentos, como antibióticos, antifúngicos o antihistamínicos, así como el contacto directo con conservantes cosméticos, pueden incrementar la sensibilidad a los rayos solares, desencadenando reacciones alérgicas.