Acinetobacter corresponde al género de bacterias frecuentemente asociadas con IAAS (infecciones relacionadas con la salud), también conocidas como infecciones nosocomiales, y el principal representante de este género es Acinetobacter baumannii, que además de causar infecciones en el ámbito hospitalario, también es resistente a la mayoría de los antibióticos utilizados, lo que dificulta el tratamiento.
Esta bacteria se considera oportunista porque provoca enfermedades en personas que tienen factores que apoyan su aparición, como la disminución de la actividad del sistema inmunológico y la hospitalización prolongada en la unidad de cuidados intensivos (UCI). Acinetobacter sp. A menudo se puede encontrar en la piel, pero en las personas ingresadas en el hospital, a menudo se identifica en la garganta y en las secreciones del tracto respiratorio.
Cómo ocurre la infección
Infección por Acinetobacter sp. Ocurre principalmente en un entorno hospitalario a través del contacto con superficies contaminadas u otra persona infectada, siendo las manos la principal vía de transmisión e infección.
Este tipo de infección es más común en personas que han estado hospitalizadas durante mucho tiempo en una UCI, tienen llagas en la piel, tienen un sistema inmunológico comprometido, tienen aparato respiratorio o tienen un catéter, por ejemplo.
Esto se debe a que las bacterias pueden formar una biopelícula en los dispositivos médicos, lo que corresponde a un mecanismo de resistencia en el que las bacterias pueden adherirse a la superficie del dispositivo y multiplicarse de manera muy eficiente, dificultando el tratamiento y provocando complicaciones.
Así, en el ámbito hospitalario, la infección por Acinetobacter sp. también se puede asociar con dispositivos médicos de uso diario.
Síntomas de la infección por Acinetobacter sp.
Los síntomas de una infección pueden variar según la ubicación y el crecimiento de la bacteria. Así, en el sistema respiratorio, Acinetobacter sp. Puede provocar signos y síntomas de neumonía, como dificultad para respirar, fiebre y dolor en el pecho.
Cuando se encuentra en el sistema urinario, puede causar síntomas de infecciones urinarias, como dolor y ardor al orinar, micción frecuente y orina turbia.
En personas que tienen un sistema inmunológico más comprometido o que llevan mucho tiempo hospitalizadas, es común que las bacterias lleguen con mayor facilidad al torrente sanguíneo y provoquen síntomas que indiquen bacteriemia, lo que corresponde a la presencia de bacterias. en la sangre, con posible fiebre alta y persistente, hipotensión, náuseas y mareos.
Vea cómo identificar los síntomas de una infección en la sangre.
Cómo se hace el diagnóstico
Diagnóstico de infección por Acinetobacter sp. Se realiza en un entorno hospitalario, ya que la mayoría de las personas con esta infección son hospitalizadas mediante la toma de una muestra de sangre, secreción traqueal y / u orina, que se envía para su análisis a un laboratorio de microbiología.
Las muestras se procesan y analizan de acuerdo con los aspectos macro y microscópicos de las colonias bacterianas obtenidas después de la incubación a 37 ° C, que es la temperatura ideal para el crecimiento bacteriano. Las bacterias se identifican de inmediato y se realiza un antibiograma, que determina el perfil de susceptibilidad y resistencia de las bacterias a los antibióticos, y esta información es importante para que el médico pueda indicar el medicamento más adecuado para la persona, que sea capaz de eliminar la bacteria. .
Aprenda cómo se realiza el antibiograma.
Prevención y tratamiento
Como Acinetobacter sp. Es multifármaco, es decir, tiene diferentes mecanismos de resistencia a los antibióticos de uso común y tiene la capacidad de formar biopelículas, que es la capacidad de las bacterias para adherirse a los dispositivos médicos y multiplicarse, lo que es difícil de tratar.
Por lo tanto, una persona a la que se le haya diagnosticado una Acinetobacter sp. Una persona multirresistente debe permanecer en el hospital en aislamiento y con precauciones de contacto, y al mismo tiempo ser tratada con antibióticos a los que la bacteria sea sensible, ya que esto evita la propagación del microorganismo y otras personas se infectan.
Para evitar infecciones, la principal acción a realizar es el correcto lavado de manos, ya que corresponden a los principales medios de transmisión de infecciones al entorno hospitalario. Además, es importante no utilizar antibióticos sin la recomendación del médico, ya que puede favorecer el desarrollo de resistencia a los antibióticos, y en el hospital, evitar estar cerca de pacientes aislados o, si es necesario, entrar en contacto con alguien, lavarse las manos antes. y después del contacto facial y use equipo de protección personal.
Obtenga más información sobre cómo evitar las infecciones nosocomiales.
Tratamiento de fagos
El tratamiento con fagos, también llamado terapia con fagos, es un tipo de tratamiento en el que se utilizan bacteriófagos para combatir infecciones que son difíciles de tratar, principalmente debido a la resistencia múltiple a los antibióticos. Los bacteriófagos o simplemente fagos son virus que tienen la capacidad de matar bacterias y, por tanto, su uso en el tratamiento de infecciones multirresistentes puede resultar eficaz.
Cada bacteriófago se encarga de combatir una o un grupo de bacterias, por lo que en el tratamiento de enfermedades se puede hacer un «cóctel» de bacteriófagos específicos para combatir una determinada infección. Recientemente, la terapia con fagos ha sido eficaz en el tratamiento de Acinetobacter baumannii multirresistente, en el que los bacteriófagos podrían matar las bacterias y así combatir la infección y mejorar la calidad de vida humana.
A pesar de ser una técnica antigua, el tratamiento con bacteriófagos ha ganado importancia en los últimos años debido a la gran cantidad de microorganismos multirresistentes.