La esteatosis hepática, también conocida como hígado graso, es una condición en la que existe una acumulación de grasa en el hígado debido a factores genéticos, obesidad, diabetes tipo 2 o colesterol alto, por ejemplo.
Los síntomas de la esteatosis hepática suelen presentarse cuando la grasa en el hígado supera el 10%, con una cantidad acumulada de grasa e inflamación de las células hepáticas, dando como resultado el desarrollo de algunos síntomas, los principales de los cuales son:
- Fatiga excesiva;
- Malestar en el abdomen derecho
- Malestar general;
- Hinchazón abdominal;
- Pérdida de peso sin motivo aparente;
- Sillas más ligeras;
- Picazón de la piel;
- Náuseas, vómitos y diarrea.
Los signos o síntomas que indican enfermedad no siempre se identifican, ya que la mayoría de las personas son asintomáticas, ya que dependen de la cantidad de grasa acumulada, la causa y el grado de esteatosis.
Obtenga más información sobre las principales causas de la esteatosis hepática.
Prueba de síntomas en línea
Para conocer el riesgo de hígado graso, elija los síntomas que muestra en la siguiente prueba:
- 1. ¿Tiene pérdida de apetito? No si
- 2. ¿Tiene dolor en la parte superior derecha del abdomen? No si
- 3. ¿Tiene el estómago hinchado? No si
- 4. ¿Tiene heces blanquecinas? No si
- 5. ¿Tiene fatiga frecuente? No si
- 6. ¿Tiene un dolor de cabeza constante? No si
- 7. ¿Tiene mareos y vómitos? No si
- 8. ¿Tiene los ojos y la piel amarillos? No si
Que hacer en caso de duda
En presencia de signos y síntomas de hígado graso, es importante consultar a un gastroenterólogo o médico de cabecera para solicitar pruebas de laboratorio y de imagen que ayuden a confirmar el diagnóstico de esteatosis hepática e identificar la causa del cambio.
De esta forma, el médico puede ordenar mediciones de glucosa en ayunas, colesterol total y fracciones, además de pruebas que evalúan la función hepática como TGO, TGP y gamma-GT, por ejemplo. También se puede realizar un examen físico y una ecografía, una tomografía o una resonancia magnética del abdomen para identificar cambios en el órgano y evaluar la progresión de la enfermedad.
Tratamiento de la esteatosis hepática
El tratamiento de la esteatosis hepática debe ser prescrito por un gastroenterólogo, según los síntomas que se presenten y la causa. También puede estar indicado para evitar la ingesta de alcohol, seguir una dieta baja en grasas y azúcares, especialmente en personas con problemas de sobrepeso, hipercolesterolemia o diabetes; controlar el uso de ciertos medicamentos, que pueden causar acumulación de grasa en el hígado como efecto secundario; o tratar enfermedades como la hepatitis B y C, si esa es la causa. Vea cómo debería ser su dieta en caso de hígado graso.
Además, es importante recordar que durante el embarazo, el desarrollo de esteatosis hepática es una complicación muy grave que puede provocar la muerte tanto de la madre como del bebé, por lo que es importante identificarla y tratarla según las indicaciones del médico.
Cuando el tratamiento no se realiza correctamente y la persona mantiene la causa de la enfermedad, el exceso de grasa en el hígado puede aumentar y causar un daño severo a las células hepáticas provocando cirrosis.
Mire el siguiente video e infórmese sobre la dieta para el tratamiento del hígado graso: