La píldora anticonceptiva es el método más utilizado por las mujeres para evitar embarazos precoces porque es fácil de usar y tiene una alta efectividad frente a embarazos no deseados.
Este fármaco actúa inhibiendo la ovulación, evitando así la fertilización; además, previene la expansión del cuello uterino, lo que reduce la entrada de espermatozoides y no permite que el útero tenga las condiciones necesarias para el desarrollo del bebé.
Pero la píldora anticonceptiva debido a los cambios hormonales que provoca en el cuerpo de la mujer puede provocar algunos efectos secundarios como dolores de cabeza, aumento de peso o espinillas, por ejemplo, por lo que en algunos casos es necesario acudir a un ginecólogo. para cambiar el tipo de anticoncepción o cambiar su dosis.
Los principales efectos secundarios de las píldoras anticonceptivas son los siguientes:
1. Dolor de cabeza y náuseas
Algunos síntomas premenstruales, como dolores de cabeza, dolor abdominal y náuseas, son comunes en la primera semana de tomar píldoras anticonceptivas debido a cambios hormonales importantes.
Hacer: Es recomendable consultar a un ginecólogo cuando estos síntomas te impidan realizar las actividades diarias o pasados más de 3 meses, ya que puede ser necesario cambiar el tipo de anticoncepción.
2. Flujo menstrual alterado
Es común que haya una reducción en la cantidad y duración del sangrado durante la menstruación, así como sangrado entre cada ciclo menstrual, especialmente con el uso de anticonceptivos de dosis baja que hacen que el revestimiento del útero sea más delgado y frágil.
Hacer: puede ser necesario tomar un anticonceptivo de dosis más alta siempre que se presente sangrado o manchas con más de 3 ciclos menstruales.
Obtenga más información sobre el sangrado fuera de su período.
3. Aumento de peso
El aumento de peso puede ocurrir cuando los cambios hormonales causados por las píldoras anticonceptivas aumentan la necesidad de comer. Además, algunos anticonceptivos pueden provocar retención de líquidos debido a la acumulación de sodio y potasio en los tejidos corporales, provocando un aumento de peso.
Hacer: Se debe mantener una dieta sana y equilibrada, así como una actividad física regular. Pero cuando una mujer sospecha retención de líquidos debido a la hinchazón de las piernas, debe consultar a un ginecólogo para cambiar la píldora anticonceptiva o tomar un diurético.
Aprenda sobre 7 tés que puede usar contra la retención de líquidos.
4. Aparición de espinillas
Aunque las píldoras anticonceptivas se usan a menudo como tratamiento para prevenir el acné en la adolescencia, algunas mujeres que usan minipíldoras (píldoras que contienen solo progesterona) pueden experimentar un mayor número de granos en los primeros meses de uso.
Hacer: Cuando se presenta o empeora el acné después de comenzar con la píldora anticonceptiva, es recomendable informar al ginecólogo, y si es necesario consultar a un dermatólogo para ajustar el tratamiento o comenzar a usar cremas para tratar las espinillas.
5. Cambios de humor
Los cambios de humor ocurren principalmente con el uso prolongado de píldoras hormonales en dosis altas, ya que los niveles altos de estrógeno y progestina pueden reducir la producción de serotonina, una hormona que mejora el estado de ánimo y puede aumentar el riesgo de depresión.
Hacer: Es recomendable consultar a un ginecólogo para cambiar el tipo de píldora anticonceptiva o iniciar otro método anticonceptivo como el DIU o el diafragma.
Obtenga más información sobre el DIU.
6. Disminución de la libido
Las píldoras anticonceptivas pueden causar una disminución de la libido debido a la producción reducida de testosterona en el cuerpo, pero este efecto es más común en mujeres con altos niveles de ansiedad.
Hacer: Se debe consultar a un ginecólogo para ajustar los niveles hormonales de la píldora anticonceptiva o iniciar el reemplazo hormonal para evitar una disminución de la libido.
A continuación se ofrecen algunos consejos que le ayudarán a aumentar su deseo sexual.
7. Mayor riesgo de trombosis
Las píldoras anticonceptivas pueden aumentar el riesgo de trombosis venosa profunda cuando una mujer tiene otros factores de riesgo cardiovascular como presión arterial alta, diabetes o colesterol alto, por ejemplo.
Hacer: Es necesario mantener una dieta saludable y realizar actividad física regular, además de consultar a su médico de cabecera con regularidad para evaluar su presión arterial, niveles de azúcar en sangre y colesterol para evitar la formación de coágulos sanguíneos que pueden provocar una trombosis venosa profunda.
¿Cuándo debería cambiar su método anticonceptivo?
Se recomienda consultar a un ginecólogo y evaluar la posibilidad de utilizar otro método para evitar embarazos no deseados, siempre que se produzcan efectos secundarios que interfieran con las actividades diarias o cuando los síntomas tarden más de 3 meses en desaparecer.