La dificultad para respirar, científicamente conocida como disnea, puede tener una variedad de causas como actividad física excesiva, ansiedad, nerviosismo, bronquitis o asma, entre otras situaciones que pueden ser más graves y deben ser investigadas por un médico.
Cuando aparece la sensación de falta de aire, el primer paso es sentarse y tratar de calmarse, pero si esta sensación no mejora después de media hora o, si empeora, debe acudir a urgencias.
Algunas de las principales causas o enfermedades que pueden provocar dificultad para respirar son:
1. Estrés y ansiedad
Las causas emocionales son la causa más común de dificultad para respirar en personas sanas. Así, en caso de ansiedad, estrés excesivo o incluso en una crisis con trastorno de pánico, el individuo puede tener dificultad para respirar.
Hacer: Es importante buscar ayuda psicológica para afrontar los problemas sin perjudicar su salud. Además, se recomienda realizar actividad física, mantener una dieta saludable, beber té relajante como la manzanilla o tomar cápsulas de valeriana. Conozca algunos remedios caseros para la ansiedad.
2. Actividad física excesiva
Las personas que no están acostumbradas a la actividad física pueden experimentar dificultad para respirar al iniciar cualquier tipo de ejercicio, principalmente caminar o correr, debido a la falta de forma física. Suele ocurrir en personas con sobrepeso o sedentarias.
Hacer: en este caso, basta con seguir haciendo ejercicio con regularidad para que el corazón y la respiración se habitúen al esfuerzo físico.
3. Embarazo
La dificultad para respirar es común después de la semana 26 de embarazo porque el diafragma está comprimido por el crecimiento del abdomen, lo que deja a los pulmones menos espacio para expandirse.
Hacer: Debes sentarte en una silla cómoda o recostarte en la cama con almohadas, cerrando los ojos y concentrándote en respirar, tratando de respirar y exhalar profunda y lentamente. Para dormir, es ideal utilizar una almohada en un ángulo de 45 grados y para facilitar la respiración. Infórmese sobre otras causas y si la falta de aire puede afectar a su bebé.
4. Problemas cardíacos
Enfermedades como la insuficiencia cardíaca causan dificultad para respirar durante el esfuerzo, como levantarse de la cama o subir escaleras. Normalmente, las personas con esta afección informan que la dificultad para respirar empeora con el tiempo y que la persona también puede tener dolor en el pecho similar a una angina. Obtenga más información sobre los síntomas de los problemas cardíacos.
Hacer: Debe seguir el tratamiento prescrito por su médico, que generalmente se realiza con el uso de medicación.
5. SOVID-19
SOVID-19 es una infección causada por un nuevo tipo de coronavirus, el SARS-CoV2, que puede infectar a las personas y desarrollar síntomas que pueden ir desde la gripe común hasta una infección más grave, e incluso puede hacer que algunas personas sientan falta de aliento.
Además de la dificultad para respirar, las personas con SOVID-19 pueden tener dolores de cabeza, fiebre, malestar, dolores musculares, pérdida del olfato y del gusto y tos seca. Conozca otros síntomas de COVID-19.
Los síntomas más graves de SOVID-19 son más comunes en personas que tienen una enfermedad crónica o que tienen cambios en el sistema nervioso debido a una enfermedad o la edad, pero las personas sanas también pueden infectarse con el virus y desarrollar síntomas graves, por lo que es importante tomar medidas para prevenir infecciones.
Hacer: en caso de sospecha de KOVID-19, es decir, cuando la persona presenta síntomas indicativos de infección por el nuevo coronavirus, es importante informar a los servicios de salud para que se pueda realizar la prueba y confirmar el diagnóstico.
En caso de resultado positivo, se recomienda que la persona permanezca aislada y avise a las personas con las que tuvo contacto para que también puedan realizar la prueba. Vea más consejos sobre qué hacer para protegerse del nuevo coronavirus.
En el siguiente video puedes ver más información sobre SOVID-19 y cómo prevenir infecciones:
6. Enfermedades respiratorias
Los resfriados y la gripe, especialmente cuando una persona tiene mucha flema o resfriados, pueden causar dificultad para respirar y tos. Pero ciertas enfermedades, como el asma, la bronquitis, la neumonía, el edema pulmonar y el neumotórax, también pueden causar dificultad para respirar. Estas son algunas características de las principales enfermedades respiratorias que causan este síntoma:
- Asma– La dificultad para respirar comienza repentinamente, puede sentir enrojecimiento o una sensación de opresión en el pecho y puede experimentar signos como tos y exhalación prolongada;
- Bronquitis– la dificultad para respirar está directamente relacionada con la flema acumulada en las vías respiratorias o los pulmones;
- HOBBLa dificultad para respirar comienza lentamente y empeora con el tiempo, por lo general afecta a personas con bronquitis o enfisema. La dificultad para respirar suele ir acompañada de otros síntomas como tos fuerte con flema y exhalación prolongada;
- NeumoníaLa dificultad para respirar comienza gradualmente y empeora con el tiempo. Además, puede tener dolor de espalda o directamente en los pulmones (respiración), fiebre y tos;
- Neumotórax– la dificultad para respirar comienza repentinamente, acompañada de dolor en la espalda o los pulmones al respirar;
- Embolia pulmonarLa dificultad para respirar comienza repentinamente y puede ir acompañada de tos, dolor de pecho y desmayos. La enfermedad generalmente afecta a personas que se han sometido a una cirugía reciente y que han estado en reposo durante algún tiempo. Además, las mujeres que toman píldoras anticonceptivas tienen un mayor riesgo de desarrollar la enfermedad.
Hacer: en caso de gripe o resfriado, se deben tomar medicamentos, bajo indicación médica, para expulsar flemas y mucosidades para una mejor respiración. En caso de enfermedades más graves, debe seguir el tratamiento prescrito por un médico, que se puede realizar con el uso de medicamentos específicos y fisioterapia respiratoria.
7. Obstrucción de las vías respiratorias
Cuando hay una obstrucción de las vías respiratorias, la dificultad para respirar aparece repentinamente. Esta obstrucción puede ocurrir en una variedad de situaciones tales como: comer; en el caso de que los bebés traguen un objeto o lo respiren por la nariz; o en gente clavada.
La obstrucción de la vía aérea puede ser parcial o completa, cuando es parcial, el individuo logra respirar con cierta dificultad y suele comenzar a toser hasta que el objeto es expulsado. Sin embargo, cuando la obstrucción es completa, se puede identificar porque no se escucha ningún sonido al respirar o el individuo no puede hablar o toser y generalmente sufre un paro cardiorrespiratorio y cae inconsciente.
Hacer: Cuando el objeto está en la nariz o se puede quitar fácilmente de la boca, puede intentar quitarlo con mucho cuidado. Sin embargo, lo ideal es colocar a la persona de costado para desbloquear sus vías respiratorias, cuando no sea posible identificar qué está dificultando la respiración, debe llamar al número de emergencia o acudir al departamento de emergencias lo antes posible.
En caso de que la persona se desmaye, se debe iniciar la maniobra de reanimación cardiopulmonar, más conocida como RCP, hasta que el personal médico llegue al lugar. Vea cómo se debe realizar la RCP.
8. Reacción alérgica
En este caso, la dificultad para respirar comienza repentinamente después de tomar medicamentos, comer algo a lo que el individuo es alérgico o después de ser picado por un insecto al que es alérgico. Este es un síntoma característico que se presenta cuando se trata de alergias graves, que pueden provocar un shock anafiláctico.
Qué hacer: lLas personas con alergias graves suelen llevar consigo adrenalina para casos de emergencia. Si es así, debe administrarse inmediatamente y debe informar al personal médico que se administró la inyección.
Cuando la persona no recibe esta inyección, se debe llamar a una ambulancia o se debe llevar al individuo inmediatamente al departamento de emergencias. En el caso de parada cardiorrespiratoria, se debe iniciar la técnica de reanimación cardiopulmonar, comúnmente conocida como RCP. Vea cómo realizar la RCP.
9. Obesidad
El exceso de peso y la obesidad también pueden causar dificultad para respirar al acostarse o dormir, ya que el peso reduce la capacidad de los pulmones para expandirse durante la toma de aire.
Hacer: Para intentar respirar mejor y con menos esfuerzo, con almohadas para dormir puedes intentar mantenerte en una posición más propensa, pero lo más importante es adelgazar mediante una dieta equilibrada prescrita por un nutricionista.
10. Enfermedades neuromusculares
La miastenia gravis y la esclerosis lateral amiotrófica también pueden causar dificultad para respirar, ya que estas enfermedades provocan debilidad de los músculos que producen la respiración.
Qué hacer: sDebes seguir el tratamiento prescrito por tu médico para controlar la enfermedad, además siempre te informaremos de la frecuencia con la que te falta el aire, ya que puede ser necesario cambiar el medicamento o ajustar la dosis.
11. Disnea paroxística nocturna
Ésta es una de las causas más comunes de dificultad para respirar durante la noche, que provoca dificultad para dormir. Generalmente, es causada por problemas cardíacos o enfermedades respiratorias, como bronquitis crónica o asma.
Hacer: en estos casos, se recomienda la consulta médica, ya que pueden ser necesarias algunas pruebas de laboratorio para identificar la enfermedad e iniciar el tratamiento adecuado.
¿Qué hacer en caso de dificultad para respirar?
En caso de dificultad para respirar, el primer paso es mantener la calma y sentarse cómodamente, cerrando los ojos para que pueda concentrarse en su propia respiración. Después de esto, debe comenzar con ejercicios de inspiración y exhalación durante unos minutos, para que pueda regular su respiración y aliviar la dificultad para respirar.
Si la dificultad para respirar es causada por una enfermedad temporal, como la gripe o el resfriado, puede nebulizar inhalando el vapor de té de eucalipto, ya que esto ayudará a obstruir las vías respiratorias, facilitará el paso del aire y reducirá las molestias. .
Sin embargo, si la dificultad para respirar es causada por enfermedades más complicadas, como asma o bronquitis, puede ser necesario usar medicamentos específicos para las vías respiratorias, como Aerolin o Salbutamol, según lo prescrito por su médico.
Exámenes obligatorios
Las pruebas no siempre son necesarias para identificar la causa de la disnea, ya que en algunos casos son obvias, como fatiga, obesidad, estrés, embarazo, asma, bronquitis o enfermedades cardíacas o respiratorias previamente diagnosticadas.
Pero en algunos casos, es posible que el médico necesite una radiografía de tórax, ECG, espirometría, hematología, glucosa en sangre, TSH, urea, electrolitos y gas arterial para que el médico diagnostique la causa de este síntoma.
¿Qué debería decirle a su médico?
Alguna información que puede ser de utilidad al médico para conocer la causa e indicar el tratamiento son:
- ¿Cuándo ocurrió la falta de aire?
- ¿En qué época del año ?, y si la persona estaba fuera del país o no;
- Si realizó actividad física o esfuerzo antes de comenzar este síntoma;
- Con qué frecuencia ocurren los momentos más difíciles;
- Si se acompaña de otros síntomas al mismo tiempo, como: tos, flema o uso de algún medicamento.
También es muy útil para el médico saber si la sensación de falta de aire le hace sentir enrojecido, si siente opresión en el pecho o si realmente necesita esforzarse para respirar.