La gripe H1N1, también conocida como gripe H1N1, gripe porcina, gripe A o gripe A, es una enfermedad viral que se transmite fácilmente de persona a persona y, si no se trata, puede provocar algunas complicaciones respiratorias como neumonía, por ejemplo.
Los síntomas de la gripe H1N1 son muy similares a los de la gripe común, pero aparecen repentinamente y con mayor intensidad, provocando fiebre alta, fuerte dolor de cabeza y dificultad para respirar. Por ello, ante la presencia de estos síntomas, es importante que la persona acuda al médico para que se le pueda indicar el tratamiento lo antes posible.
Principales síntomas
Los principales signos y síntomas que pueden causar la influenza H1N1 son:
- Fiebre repentina por encima de 38 ° C;
- Tos intensa;
- Dolor de cabeza persistente;
- Dolor de articulaciones y músculos;
- Falta de apetito;
- Escalofríos frecuentes
- Nariz tapada, estornudos y dificultad para respirar;
- Náuseas y vómitos;
- Diarrea;
- Malestar general.
El médico de cabecera puede indicar, si es necesario, un examen para identificar la enfermedad y evaluar las complicaciones asociadas, así como para dar instrucciones individuales para su tratamiento.
Principales síntomas en niños y bebés
En bebés y niños, la gripe H1N1 causa los mismos síntomas que en los adultos, pero el dolor abdominal y la diarrea son más comunes. Para identificar esta enfermedad es importante que los padres estén atentos a algunos signos como aumento de la irritabilidad y llanto del bebé, y en el caso de los niños suelen mencionar que duele todo el cuerpo, lo que puede ser un dolor de cabeza. causado por esta gripe.
En casos de fiebre, tos e irritabilidad persistente, se debe contactar a un pediatra para comenzar el tratamiento apropiado, ya que los medicamentos son más efectivos cuando se usan dentro de las primeras 48 horas de la enfermedad.
El tratamiento se puede realizar en casa, pero es importante evitar el contacto con otros niños para prevenir la transmisión de la enfermedad, y se recomienda evitar enviarlos al jardín de infancia o la escuela durante al menos 8 días.
¿Cuál es la diferencia entre la gripe H1N1 y la gripe común?
Aunque la gripe H1N1 y la gripe común son similares, en el caso de la gripe H1N1, el dolor de cabeza es más intenso y puede incluir dolor en las articulaciones y dificultad para respirar. Además, la infección con el virus responsable de la gripe H1N1 se asocia con algunas complicaciones respiratorias, especialmente en niños, ancianos y personas con sistemas inmunológicos comprometidos.
Por esta razón, la gripe H1N1 generalmente se trata con medicamentos antivirales recetados por un médico para prevenir complicaciones. Por otro lado, la gripe común no necesita un tratamiento específico, solo está indicado el descanso, beber mucha agua y una dieta saludable, porque el sistema inmunológico puede combatir la enfermedad de forma natural, sin riesgo de ocasionar complicaciones.
A diferencia de la gripe H1N1, la gripe común no produce dolor en las articulaciones, el dolor de cabeza es más soportable, no hay dificultad para respirar y hay una gran producción de secreciones.
Cómo se hace el diagnóstico
El diagnóstico de influenza H1N1 se realiza principalmente a través de un examen clínico por parte de un médico generalista, infectólogo o neumólogo, donde evalúan los signos y síntomas de la persona.
Además, en los casos más graves en los que existe un compromiso de la capacidad respiratoria, el médico puede indicar el análisis de las secreciones presentes en la nariz y la garganta. Esta prueba le permite confirmar el tipo de virus presente e indicar el tratamiento más adecuado, si es necesario.