El soplo cardíaco es un trastorno cardíaco muy común que hace que suenen latidos cardíacos adicionales, lo que generalmente indica solo turbulencia en el torrente sanguíneo, sin ninguna enfermedad cardíaca. En estas situaciones, la afección se conoce como soplo cardíaco inocente y no requiere tratamiento.
De hecho, el tinnitus es tan común que muchos bebés nacen con este trastorno y se desarrollan con bastante normalidad, y pueden desaparecer naturalmente durante el crecimiento. De esta forma, muchas personas ni siquiera saben que ya tienen un soplo cardíaco, y algunas solo lo detectan durante los chequeos de rutina, por ejemplo.
Pero hay casos en los que el ruido puede ser un signo de enfermedad cardíaca, por lo que si su médico lo considera necesario, se pueden realizar varias pruebas cardíacas para confirmar si hay una enfermedad que necesita tratamiento.
Síntomas que pueden indicar una enfermedad cardíaca.
El único signo en niños o adultos de soplos cardíacos benignos es la aparición de un sonido adicional durante una evaluación física realizada por un médico con un estetoscopio.
Sin embargo, si se presentan otros síntomas relacionados, el ruido puede ser un signo de enfermedad o un cambio en la estructura del corazón. Los síntomas más comunes en estos casos incluyen los siguientes:
- Labios, lengua y yemas de los dedos rojos;
- Dolor de pecho;
- Tos frecuente;
- Mareos y desmayos;
- Fatiga excesiva;
- Sudoración excesiva;
- Latido del corazón más rápido de lo habitual;
- Hinchazón generalizada en el cuerpo.
Los niños también pueden tener poco apetito, pérdida de peso y problemas de desarrollo, por ejemplo.
Además, siempre que se sospeche acidez de estómago, es importante consultar a un cardiólogo pediatra, en el caso de bebés o niños; o un cardiólogo, en el caso de los adultos, para confirmar el diagnóstico e identificar si existe un problema cardíaco a tratar o simplemente un soplo inocente.
Cómo se realiza el tratamiento
El soplo cardíaco, cuando se considera inocente y sin perjuicio para la salud, no requiere tratamiento y permite la vida sin restricciones. Esto suele ocurrir en niños que no tienen otras enfermedades del corazón o en mujeres embarazadas, sin dañar el embarazo ni el feto.
Sin embargo, cuando el soplo cardíaco es causado por una enfermedad, el tratamiento se puede realizar mediante la administración de medicamentos y, en los casos más graves, mediante cirugía para corregir el problema.
Es importante recordar que otras enfermedades menos graves, como la anemia, también pueden provocar soplos cardíacos. En estos casos, debe tratarse de inmediato para eliminar el ruido.
Para identificar otras enfermedades, busque signos que puedan indicar problemas cardíacos.