La inmunoglobulina A, conocida principalmente como IgA, es una proteína que se encuentra en grandes cantidades en la mucosa, principalmente en la mucosa respiratoria y gastrointestinal, además, se puede encontrar en la leche materna, puede transmitirse al bebé durante la lactancia y, por tanto, estimula el desarrollo del sistema inmunológico.
Esta inmunoglobulina tiene la función principal de defensa del organismo y por tanto, cuando en concentraciones menores, puede favorecer el desarrollo de infecciones, las cuales deben ser identificadas y tratadas según las indicaciones del médico.
¿Para qué sirve la IgA?
La función principal de la IgA es proteger al organismo de las infecciones y puede obtenerse inicialmente a través de la lactancia materna, donde las inmunoglobulinas maternas se transmiten al bebé. Esta proteína se puede clasificar en dos tipos según su ubicación y características y puede tener diferentes funciones que son importantes para la defensa del organismo:
- IgA 1, que está presente principalmente en el suero y es responsable de la protección inmunológica, ya que es capaz de neutralizar toxinas u otras sustancias producidas por la entrada de microorganismos;
- IgA 2, que está presente en la mucosa y se asocia con un componente secretor. Este tipo de IgA es resistente a la mayoría de las proteínas producidas por las bacterias, que son las encargadas de destruir las células del organismo, y por tanto corresponde a la primera línea de defensa frente a los agentes infecciosos, que ingresan al organismo a través de las mucosas.
La inmunoglobulina A se puede encontrar en las lágrimas, la saliva y la leche materna, además de estar presente en los sistemas genitourinario, digestivo y respiratorio, protegiendo estos sistemas de infecciones.
Aprenda cómo funciona el sistema inmunológico.
Valores normales de IgA
El valor de la inmunoglobulina A varía según la edad de la persona y el laboratorio en el que se analiza la prueba y puede ser:
Recién nacidos (fecha límite) | 1-4 mg / dl |
3 meses | 5-5 mg / dl |
6 meses | 8-70 mg / dl |
1 año | 10-100 mg / dl |
2-6 años | 10-160 mg / dl |
7-12 años | 30-200 mg / dl |
Adultos | 70-400 mg / dl |
Que puede causar niveles elevados de IgA
Un aumento de IgA puede ocurrir cuando hay un cambio en la mucosa, principalmente en la mucosa gastrointestinal y respiratoria, ya que esta inmunoglobulina se encuentra principalmente en esta zona. Así, la cantidad de IgA puede aumentar en el caso de infecciones respiratorias o intestinales, y en el caso de cirrosis hepática, por ejemplo, puede haber un cambio en el caso de infecciones cutáneas o renales.
Es importante realizar otras pruebas para identificar la causa de la IgA elevada para poder iniciar el tratamiento más adecuado.
Que puede causar niveles bajos de IgA
La disminución de IgA circulante es normalmente genética y no conduce al desarrollo de síntomas asociados a este cambio, lo que se considera deficiencia cuando la concentración de esta inmunoglobulina es menor de 5 mg / dL en sangre.
Sin embargo, la pequeña cantidad de esta inmunoglobulina circulante en el organismo puede favorecer el desarrollo de enfermedades porque las membranas mucosas están desprotegidas. De esta forma, además de reducirse por factores genéticos, el déficit de IgA puede estar presente en el caso de:
- Trastornos inmunológicos;
- Asma;
- Alergias respiratorias;
- Fibrosis quística;
- Leucemia;
- Diarrea crónica;
- Síndrome de malabsorción;
- Recién nacidos con rubéola;
- Personas que han tenido un trasplante de médula ósea;
- Niños infectados con el virus de Epstein-Barr.
Normalmente, cuando hay una disminución de IgA, el cuerpo intenta compensar esta disminución aumentando la producción de IgM e IgG para combatir la enfermedad y proteger el cuerpo. Es importante, además de los niveles de IgA, IgM e IgG, realizar pruebas más específicas para identificar la causa del cambio y así comenzar el tratamiento más adecuado. Obtenga más información sobre IgM e IgG.