El cultivo de heces, también conocido como cultivo microbiológico de heces, es un examen que tiene como objetivo identificar el agente infeccioso responsable de los trastornos gastrointestinales, y generalmente busca atención médica cuando se sospecha de infección por Salmonella spp, Campylobacter spp., Escherichia coli o Shigella. spp.
Para realizar esta prueba, se recomienda que la persona sea evacuada y que la muestra de heces se almacene adecuadamente durante las primeras 24 horas en un laboratorio para que se pueda realizar un análisis para identificar las bacterias responsables del cambio gastrointestinal. a pesar de que se han identificado bacterias que forman parte de la microbiota intestinal normal.
Para qué sirve
El cultivo de heces se utiliza para identificar microorganismos que pueden estar asociados con trastornos gastrointestinales, como intoxicación alimentaria o infección intestinal. De esta forma, esta prueba puede ser solicitada por el médico cuando la persona presente alguno de los siguientes síntomas:
- Malestar abdominal;
- Diarrea;
- Náuseas y vómitos;
- Fiebre;
- Malestar general;
- Presencia de moco o sangre en las heces;
- Disminucion del apetito.
En la mayoría de los casos, además de indicar cultivo de heces, el médico exige un examen parasitológico de las heces, que es un examen que identifica la presencia de parásitos en las heces responsables de los síntomas gastrointestinales, como Giardia lamblia, Entamoeba histolytica, Taenia. . v. y Ancylostoma duodenale, p. ej.
Cómo se realiza el cultivo de heces
Para realizar el cultivo de heces, se recomienda que la persona tome una muestra de heces, evitando aquellas que hayan entrado en contacto con la orina o el inodoro. Asimismo, si nota sangre, mocos u otros cambios en las heces, se recomienda tomar una muestra de esta parte, pues de esta forma existe una mayor posibilidad de identificar los microorganismos probablemente responsables de la infección.
En algunos casos, su médico puede sugerir que el muestreo se realice con un hisopo o hisopo de algodón directamente en el recto de la persona; este tipo de muestreo se realiza con más frecuencia en personas hospitalizadas. Obtenga más información sobre la prueba de heces.
Después de la recolección y almacenamiento adecuado de la muestra, se debe llevar a un laboratorio para su análisis. En el laboratorio, las heces se colocan en medios de cultivo específicos que permiten el desarrollo de bacterias invasoras y toxógenas, que son aquellas que no forman parte de la microbiota normal o que forman parte pero producen toxinas y provocan síntomas gastrointestinales.
Es importante que la persona indique si ha tomado antibióticos o si lo ha hecho en los últimos 7 días antes de la prueba, ya que esto puede interferir con el resultado. Tampoco está indicado que la persona use laxantes para estimular la evacuación, ya que esto puede interferir con el resultado del examen.