La náusea es un síntoma que se caracteriza por la necesidad de vomitar y, cuando es constante, puede indicar condiciones específicas, como el embarazo y el uso de ciertos medicamentos, como la quimioterapia, por ejemplo.
Algunos problemas de salud también pueden causar náuseas persistentes, como laberintitis, reflujo gastroesofágico, ansiedad e intolerancia alimentaria, y el tratamiento para mejorar este síntoma depende del consejo de su médico. En los casos en que las náuseas persistentes se asocian con el desarrollo de otros síntomas, como sangrado de la boca y fiebre, se debe buscar atención médica inmediata.
De esta forma, las principales causas de las náuseas persistentes pueden ser:
1. Embarazo
Se producen varios cambios hormonales durante el embarazo, como la aparición de gonadotropina coriónica, conocida como hCG, un aumento de estrógeno y progesterona; Estos trastornos provocan cambios en el cuerpo, como dolor en el pecho, y también provocan síntomas como aversión a los olores fuertes, mareos y náuseas persistentes.
Las náuseas persistentes causadas por el embarazo generalmente ocurren entre la séptima y la décima semana, pero pueden durar más y, en algunos casos, estos síntomas pueden extenderse hasta el final del embarazo.
Hacer: Para mejorar los síntomas de las náuseas persistentes durante el embarazo, es importante permanecer en ayunas durante menos tiempo, evitar el ayuno prolongado, y también es necesario consumir alimentos más ligeros, menos grasos y evitar la ingesta de líquidos en las dos primeras horas posteriores al despertar. hasta.
Si las náuseas persistentes provocan vómitos y no se detienen, se recomienda que consulte a un obstetra para recetar antieméticos adecuados para mujeres embarazadas. Incluso el agua de jengibre es un remedio natural para las mujeres embarazadas que tienen náuseas constantes.
2. Laberintitis
La laberintitis es una inflamación que se produce en el nervio del laberinto, un órgano situado dentro del oído, provocada por infecciones virales, bacterianas, micóticas o por lesión en la región del oído. Esta afección también puede desencadenarse al comer ciertos alimentos o viajar en bote, lo que causa síntomas como náuseas constantes, mareos y zumbidos en los oídos.
El diagnóstico de laberintitis debe ser realizado por un otorrinolaringólogo a través de la historia clínica de la persona, así como examen físico y pruebas audiométricas.
Hacer: El tratamiento para la laberintitis es recomendado por un otorrinolaringólogo y consiste en el uso de medicamentos antieméticos para aliviar los mareos y las náuseas. También se puede realizar mediante cambios en los hábitos alimentarios, evitando alimentos que aumenten la inflamación y los mareos, como el azúcar y el alcohol.
3. Reflujo gastroesofágico
El reflujo gastroesofágico es una afección que ocurre cuando el contenido del estómago regresa al esófago e incluso a la boca, causando síntomas como náuseas persistentes, sensación de ardor en la garganta o el estómago, tos seca y dolor en el pecho. Obtenga información sobre otros síntomas de reflujo en adultos y bebés.
Este tipo de reflujo puede ocurrir porque la válvula en el esófago no puede evitar que regrese el contenido del estómago; Esto puede suceder cuando, por ejemplo, una persona tiene una hernia de hiato. Para diagnosticar el reflujo gastroesofágico, es necesario consultar a un gastroenterólogo para solicitar pruebas como la endoscopia y la medición del pH.
Hacer: Después de la confirmación del diagnóstico, el médico puede sugerir un tratamiento basado en el uso de medicamentos para reducir la acidez gástrica, con el fin de mejorar la motilidad esofágica y acelerar el vaciamiento gástrico. En este caso, también debe evitar las bebidas con cafeína y las comidas picantes.
Mire el video a continuación para ver cómo debería verse la dieta:
4. Migraña / migraña
Un dolor de cabeza o migraña es un tipo de dolor de cabeza que se caracteriza por repetirse y agravarse cuando una persona está estresada, no come o permanece en contacto con olores fuertes y brillantes durante mucho tiempo. Además de los dolores de cabeza, que pueden ser insoportables, las migrañas también pueden estar asociadas con náuseas, vómitos, mareos y sensibilidad a la luz persistentes.
Esta condición afecta principalmente a mujeres y las causas aún no están bien definidas, pero se debe a cambios en el flujo sanguíneo cerebral.
Hacer: Cuando los síntomas de dolor de cabeza y náuseas son persistentes y duran más de 72 horas, se recomienda buscar la atención de un médico generalista o neurólogo para indicar el tratamiento más adecuado, el cual se puede realizar con analgésicos para aliviar el dolor y otros. específicos para la migraña, como zolmitriptán. Las crisis también se pueden reducir con hábitos alimenticios saludables, evitando los alimentos fuertes y realizando sesiones de acupuntura.
5. Ansiedad
La ansiedad es una preocupación excesiva por situaciones que no han sucedido o por un miedo excesivo a que suceda algo negativo. Esta sensación puede provocar síntomas físicos como aumento de la frecuencia cardíaca, fatiga excesiva, náuseas constantes e incluso dolores musculares.
Para mejorar estos síntomas y reducir la ansiedad, es necesario cambiar los hábitos diarios, como practicar actividad física, practicar técnicas de relajación y meditación, o realizar técnicas de aromaterapia, por ejemplo. Obtenga más información sobre cómo manejar el estrés y la ansiedad.
Hacer: Si aún con los cambios de hábitos la persona se siente ansiosa y sigue teniendo constantes náuseas y otros síntomas, es necesario buscar la ayuda de un psicólogo para psicoterapia y consultar a un psiquiatra, pues, en casos más graves, el tratamiento se basa en el uso. de fármacos ansiolíticos.
6. Uso de drogas
Algunos medicamentos pueden causar náuseas persistentes, principalmente aquellos con un uso continuado, como los antidepresivos como la sertralina y la fluoxetina. Los corticosteroides, los antibióticos y los medicamentos antiinflamatorios tienden a aumentar la acidez gástrica, lo que puede provocar náuseas persistentes.
Los medicamentos que se usan en quimioterapia y radioterapia para tratar el cáncer también pueden causar náuseas persistentes; Por ello, en estos casos, el médico prescribe fármacos antieméticos antes de las sesiones, para evitar que estas náuseas sean muy fuertes.
Hacer: Si una persona siente náuseas constantemente mientras toma medicamentos, es necesario consultar a un médico de cabecera para comprobar cuál es el tratamiento más adecuado. Por otro lado, el tratamiento con antidepresivos no debe abandonarse, ya que los efectos secundarios tienden a desaparecer con el tiempo, incluidas las náuseas persistentes.
7. Intolerancia alimentaria
La intolerancia a los alimentos es una condición que ocurre cuando el cuerpo reacciona a ciertos alimentos, causando síntomas físicos que pueden incluir náuseas constantes, diarrea, hinchazón y dolor abdominal. Esta condición es diferente de las alergias a los alimentos porque hace que el cuerpo reaccione instantáneamente a las alergias, como tos, enrojecimiento y picazón en la piel.
Algunas personas pueden desarrollar intolerancia a la lactosa, por ejemplo, que es el azúcar presente en la leche de vaca, que es muy común que se encuentre en una variedad de alimentos. Obtenga más información sobre cómo identificar la intolerancia a la lactosa.
Hacer: Si una persona nota que siente náuseas constantes después de comer o beber cualquier tipo de alimento, se recomienda consultar a un gastroenterólogo para confirmar el diagnóstico de intolerancia alimentaria, lo cual se puede realizar mediante análisis de sangre. El tratamiento de la intolerancia alimentaria consiste principalmente en eliminar alimentos de la dieta o utilizar enzimas como la lactasa, que ayudan al organismo a absorber el azúcar de la leche de vaca.
Cuando ver a un doctor
Generalmente, la presencia de náuseas persistentes no indica una enfermedad muy grave, sin embargo, es importante buscar atención médica lo antes posible si, además de este síntoma, ocurren otras condiciones, como:
- Sangrado de la boca;
- Vómitos excesivos;
- Fiebre;
- Debilidad;
- Dificultad para respirar;
- Dolor de pecho
Estos signos pueden indicar otros problemas de salud más graves, como trastornos del estómago y del corazón; por esta razón, requieren que la persona consulte a un médico lo antes posible.