El dolor muscular es un síntoma común que puede tener varias causas, pero generalmente se puede tratar con reposo, estiramiento y masaje. Sin embargo, cuando se vuelve más frecuente o aumenta de intensidad, puede ser necesario usar medicamentos recetados por su médico, como Bencoprim.
La mejor forma de evitar el dolor muscular es a través de la prevención, para lo cual se recomienda la actividad física regular, así como el estiramiento, además de mantener un estilo de vida saludable, evitar fumar, consumir bebidas alcohólicas y reducir el consumo de azúcar, por ejemplo.
Razones principales
El dolor muscular puede ocurrir por varias razones y la intensidad del dolor varía según el área, la causa y los síntomas. La causa más común de dolor muscular es el estiramiento o estiramiento de los músculos debido al ejercicio físico intenso, como el fútbol o el culturismo, por ejemplo.
Además de los motivos asociados con la actividad física, el dolor muscular puede ocurrir debido a enfermedades óseas, como osteomielitis u osteosarcoma, artritis, embarazo y cambios hormonales, ciática, varices o problemas circulatorios, dolor muscular en el muslo, pierna o parte inferior de la pierna. .
El dolor en los músculos del hombro, la espalda y los brazos, por ejemplo, puede ser causado por una mala postura, estrés, ansiedad, tendinitis, enfermedades degenerativas o problemas en la columna, como una hernia de disco, por ejemplo.
En caso de que el dolor muscular sea frecuente y se agrave, se recomienda acudir a un ortopedista para diagnosticar la causa del dolor e iniciar el tratamiento adecuado.
Cómo se realiza el tratamiento
El tratamiento del dolor muscular debe estar orientado según el grado de dolor y la posible causa, se recomienda acudir a un ortopedista en caso de que el dolor sea frecuente y aumente durante el día, para que se pueda realizar un diagnóstico y tratamiento adecuado. es iniciado.
1. Tratamiento natural
El tratamiento natural para los dolores musculares consiste en bañarse en agua tibia, que estimula la circulación y alivia el dolor, masajear con aceites o vinagre, estirar el músculo adolorido y mantenerlo en reposo.
Es importante mover el músculo para evitar cicatrices y entumecimiento progresivo. La inmovilización debe realizarse en cita con el médico, que suele estar indicada cuando la extensión de la lesión responsable del dolor es grande.
Alternar compresas frías y calientes en el punto dolorido puede ser otra buena opción para aliviar el dolor muscular, ya que mientras que el hielo ayuda a reducir el dolor y la inflamación local, las compresas calientes ayudan a relajar los músculos. Obtenga más información sobre cuándo usar compresas frías y calientes.
Además, se puede aliviar el dolor muscular mediante el automasaje con un rodillo de espuma sólida, que se puede comprar en tiendas de artículos deportivos, para rehabilitación o en línea. Para realizar el automasaje, coloque el rodillo en la zona dolorida y deslícelo con un pedo sobre su propio cuerpo. Los efectos de esto se reconocen rápidamente.
2. Tratamiento farmacológico
El tratamiento farmacológico suele ser prescrito por un ortopedista cuando el dolor es intenso y frecuente, puede recomendar el uso de relajantes musculares como Bencoprim, analgésicos como paracetamol y dipirona, o antiinflamatorios como ibuprofeno, nimesulida y naproxeno.
3. Grasa para el dolor muscular
Además de los medicamentos que se pueden recetar para aliviar el dolor muscular, su médico puede recomendar el uso de ungüentos, que deben aplicarse en el punto dolorido. Los ungüentos más indicados son Lonol, Diclofenac, también conocido como Voltaren o Cataflam, que son ungüentos antiinflamatorios.
El uso de los ungüentos debe ser guiado por el médico, quien suele recomendar aplicar de 2 a 3 veces al día mientras realiza movimientos circulares en la zona. En caso de que el dolor no ceda con el uso de ungüentos, se recomienda volver al médico para nuevas pruebas e identificar la causa del dolor para poder iniciar otro tipo de tratamiento.