La corriente rusa es un dispositivo de estimulación eléctrica que favorece la contracción muscular provocando un aumento de la fuerza y el volumen muscular, utilizado a menudo en fisioterapia para tratar a personas que no pueden contraer músculo de forma eficaz, como es el caso de las personas que han sufrido un ictus o que están parapléjicas. , por ejemplo.
Debido a que este dispositivo promueve el aumento de la fuerza muscular, los deportistas han utilizado la corriente rusa para mejorar el rendimiento y con fines estéticos para, por ejemplo, fortalecer los músculos de la zona abdominal. Sin embargo, para este último, sus beneficios aún son debatidos y los resultados se consideran inferiores a los obtenidos con la actividad física.
¿Cuál es el propósito de la electricidad rusa?
La corriente brusca se utiliza principalmente en fisioterapia durante la rehabilitación de personas que no pueden contraer correctamente los músculos, como en el caso de ictus, atrofia muscular y paraplejía. En estos casos, el número de sesiones depende de la situación muscular de cada persona, con la posibilidad de realizar sesiones diarias con una duración de 10 a 15 minutos.
La electricidad rusa también se puede utilizar con fines estéticos para fortalecer la zona abdominal, glúteos y piernas, así como para mejorar el rendimiento del deportista, ya que favorece la contracción muscular, lo que se traduce en una mayor fuerza y resistencia. En estos casos, la indicación es que la persona continúe con la actividad física y la corriente se aplique al músculo que necesita una contracción más fuerte.
Como funciona
La máquina de corriente rusa consta de varios conectores con almohadillas que son electrodos, los cuales se colocan estratégicamente en el medio del músculo de la zona a tratar, siempre siguiendo las instrucciones, como no ponerlos al mismo tiempo en músculos agonistas o antagonistas. , que debe ser realizado por un fisioterapeuta o preparador físico capacitado.
La máquina dará un estímulo similar al enviado por el cerebro a los músculos, generando una contracción muscular involuntaria, pero para aprovechar al máximo la sesión y el equipo, la persona debe contraer el músculo mientras recibe un estímulo eléctrico.
¿Sirve la corriente rusa para debilitarse?
La electricidad rusa se utiliza en el campo estético para mejorar la apariencia del abdomen, piernas y glúteos, pero no es tan eficaz como los ejercicios físicos, porque las contracciones producidas por el equipo no tienen la misma eficacia que las producidas por el cuerpo. Por lo tanto, los ejercicios físicos no deben reemplazarse con este equipo.
Se cree que 10 minutos de corriente rusa corresponden a más de 400 abdominales, pero para que sean realmente efectivos es importante tensar el abdomen al mismo tiempo, pues de esta forma se trabajaron todas las fibras del músculo recto del abdomen. . Lo mismo ocurre si estás en un salón de belleza con el mismo equipamiento de forma totalmente pasiva.
El caso es que la corriente rusa consigue reclutar más fibras musculares mientras la persona realiza la contracción muscular al recibir un estímulo eléctrico. Entonces, en ese caso, debería haber un aparato de corriente rusa en el gimnasio o centro de rehabilitación, por ejemplo.
Corriente rusa para tonificar el abdomen.
Así, una buena forma de fortalecer el abdomen, extrayendo lo mejor de la corriente rusa es colocando electrodos en el recto abdominal y haciendo planchas abdominales de 2 minutos, por ejemplo, repitiendo este ejercicio al menos 3 veces.
Una serie de ellos consigue fortalecer el abdomen, para tener un efecto satisfactorio, pero solo si la persona realiza una contracción al mismo tiempo que recibe la corriente. Usar esto de una manera completamente pasiva, es decir, sin contracción muscular voluntaria al mismo tiempo, no es efectivo y no tendrá beneficios significativos para el cuerpo.
Resultados de la corriente rusa
Entre los resultados de la corriente rusa se encuentran el aumento del volumen muscular, la reducción de la flacidez, la mejora de la circulación sanguínea y el drenaje linfático, una mayor facilidad para realizar los movimientos y una mayor destreza para los movimientos delicados. Sin embargo, estos resultados son más comunes cuando una persona presenta inicialmente debilidad muscular secundaria a un derrame cerebral o sigue un programa de ejercicios que se realizará junto con el uso de este equipo.
Los mejores resultados se obtienen cuando la electricidad rusa se utiliza para:
- Tratar la atrofia muscular en personas postradas en cama o en recuperación;
- Mejorar el rendimiento de los atletas;
- Objetivos estéticos, además de actividad física y nutrición adecuada.
En personas sanas, sedentarias que no realizan ningún tipo de actividad física, cuando no hay contracción voluntaria, se puede observar un ligero aumento de la fuerza y del tono muscular, con un muy pequeño aumento del volumen muscular, por lo que la corriente rusa no podrá reemplazar la práctica de ejercicio como el culturismo.
Contraindicaciones para la electricidad rusa.
Si bien es un buen tratamiento para fortalecer los músculos, la corriente rusa no debe utilizarse en los siguientes casos:
- Personas con marcapasos o enfermedad cardíaca, para no cambiar los latidos del corazón;
- Personas que padecen epilepsia porque puede provocar un ataque epiléptico;
- Enfermedad mental, por la cual la persona puede quitarse los electrodos antes del final de la sesión;
- La hipertensión es difícil de controlar debido a un posible cambio de presión;
- Debe evitarse el embarazo, la colocación del abdomen;
- Personas que padecen varices extensas;
Además, la corriente rusa no debe utilizarse durante un episodio de flebitis o trombosis venosa profunda, ni en caso de lesión de músculos, ligamentos, tendones o en caso de fractura en la zona a tratar.