Una compresa es un material absorbente que se puede utilizar para aplicar calor o frío en la zona afectada del cuerpo, o también se puede utilizar para aplicar un medicamento, aplicar una cataplasma o cubrir una herida, y puede estar hecha de algodón. o tela. e incluso hay especiales con gel, que se pueden comprar en farmacias y se pueden utilizar para aplicación tanto en frío como en caliente.
En el caso de compresas frías o calientes en cualquier parte del cuerpo, se utilizan compresas frías para reducir la inflamación, y en el caso de compresas calientes, favorecen la relajación.
Cuándo usar compresas frías
Las compresas frías promueven la reducción del flujo sanguíneo a la región, reduciendo la inflamación y el dolor, además de prevenir los hematomas. Por este motivo están indicados para:
- Después de golpes, caídas o torceduras;
- Moretones
- Después de recibir una vacuna o una inyección;
- Alivio del dolor de muelas;
- En tendinitis;
- Después de la actividad física.
Cómo hacer una compresa fría en casa.
Para hacer una compresa fría en casa, simplemente envuelva una bolsa de guisantes congelados, por ejemplo, en un paño o toalla y aplíquela en el área dolorida durante 15 a 20 minutos.
Otra opción es mezclar 1 parte de alcohol con 2 partes de agua y ponerlo en una bolsa ziplock y dejarlo en el congelador. El contenido no debe estar completamente congelado y se puede moldear según sea necesario. El método de uso es el mismo.
Cuando usar compresas tibias
Las compresas tibias o tibias estimulan el flujo sanguíneo al área aplicada, aumentan la movilidad del área aplicada y promueven la relajación, tales como:
- Dolor muscular;
- Hervir y hervir;
- Rigidez en el cuello;
- Antes de la actividad física.
Este tipo de apósito se puede aplicar en la espalda o el pecho, aunque se puede aplicar en cualquier zona del cuerpo donde sea necesario aumentar el flujo sanguíneo, siempre que no haya fiebre, ya que la temperatura corporal puede subir. . Descubra las principales causas del dolor de espalda y cómo aliviarlas.
Las compresas tibias se pueden usar de 3 a 4 veces al día, de 15 a 20 minutos, pero siempre deben envolverse en un paño o pañuelo fino, para no quemar la piel.
Cómo hacer una compresa caliente en casa.
Para hacer una compresa caliente en casa, basta con utilizar una funda de almohada y 1 kg de granos secos como arroz o frijoles, por ejemplo. Las cuentas deben colocarse dentro de la tapa, atarse firmemente para formar una almohada, calentarse en un horno de microondas durante aproximadamente 3 a 5 minutos, calentarse y aplicarse en el área dolorida durante 15 a 20 minutos.
Si el uso de la bolsa de hielo o la compresa caliente no reduce el dolor o incluso lo intensifica, debe consultar a un médico para que realice pruebas que puedan identificar la causa del dolor, que podría ser, por ejemplo, una fractura.