Las principales causas de la inflamación vaginal (vaginitis) y cómo tratarla.

La vaginitis, también conocida como vulvovaginitis, es una inflamación del área íntima de la mujer que puede ocurrir como resultado de una infección vaginal, alergias o cambios en la piel que resultan de la menopausia o el embarazo. Esta inflamación puede provocar síntomas como picazón, dolor al orinar o la presencia de flujo vaginal.

Muchas situaciones cotidianas aumentan el riesgo de vaginitis, como el uso de pantalones ajustados o tampones y la mala higiene en la región, por lo que evitar estos hábitos ayuda a prevenir este tipo de inflamación.

El tratamiento dependerá de la causa de la vaginitis, para ello es importante acudir a un ginecólogo para que realice una evaluación e identifique el problema.

Las principales causas de vulvovaginitis son:

1. Infecciones vaginales

Las infecciones son la principal causa de inflamación y secreción vaginal y son comunes en mujeres que tienen múltiples parejas sexuales, que han usado antibióticos, que tienen mala higiene o que han estado hospitalizadas durante mucho tiempo. Los más comunes son:

Vaginosis bacteriana

Es causada por bacterias que pueden multiplicarse dentro de la vagina, principalmente después de las relaciones sexuales o la menstruación, provocando una secreción amarillenta y un mal olor en la región.

Como lidiar con: con antibióticos en comprimidos y ungüentos vaginales como metronidazol o clindamicina recetados por un ginecólogo.

Tricomoniasis

Es una infección provocada por el parásito Trichomonas vaginalis, que se transmite a través de relaciones íntimas desprotegidas. Con esta infección, la mujer tiene una secreción intensa con un olor fétido de color verde amarillento y un color abultado, además de irritación de la vagina con ardor y picazón.

Como lidiar con: con comprimidos de antibióticos como metronidazol o tinidazol recetados por un ginecólogo, es importante que la pareja reciba tratamiento para evitar nuevas infecciones

Candidiasis

Es una infección por hongos, generalmente candida sp, que en las mujeres provoca una secreción espesa y blanca, mucho picor y enrojecimiento en la región vaginal, así como un aumento de la frecuencia de micción. Es más común en mujeres que tienen un sistema inmunológico debilitado debido al estrés, uso de corticosteroides o antibióticos, diabetes o infección por VIH.

Como lidiar con: con agentes antifúngicos en ungüentos o tabletas vaginales como nistatina o fluconazol recetados por un ginecólogo.

Vaginosis citolítica

Es una causa menos común de vaginitis, que causa síntomas muy similares a los de la candidiasis, que es importante examinar cuando una mujer tiene picazón persistente, ardor y secreción blanca que desaparecen y reaparecen pero no mejoran con el tratamiento de una infección por hongos. . Es causada por la proliferación de bacterias lactobacillus, que producen un exceso de ácido y provocan irritación en la vagina.

Como lidiar conLos óvulos de bicarbonato de sodio se utilizan, por vía intravaginal, 3 veces por semana o baños de asiento con bicarbonato de sodio diluido en una cucharada de 600 ml de agua dos veces al día.

Ante la presencia de estos síntomas, se debe consultar a un ginecólogo para un examen físico para que pueda hacer un diagnóstico certero e indicar el tratamiento ideal según el caso.

2. Alergias

Una reacción alérgica a un producto que entra en contacto con la zona íntima también puede provocar inflamación. Algunos ejemplos son:

  • Medicamentos;
  • Cosméticos íntimos o jabones perfumados;
  • Condón de látex;
  • Tejidos sintéticos para ropa íntima;
  • Papel higiénico de color o perfumado;
  • Suavizante de telas.

Esta inflamación provoca síntomas como picor, ardor y enrojecimiento, que pueden resultar muy incómodos y repetirse varias veces hasta que se identifica la causa. El tratamiento se realiza evitando el tipo de material que provoca la alergia, además de la pomada o comprimidos a base de corticoides y antialérgicos recetados por el ginecólogo para aliviar los síntomas.

3. Cambios en la piel

Algunas situaciones pueden hacer que la piel de la vagina sea más delgada y más sensible, como durante la menopausia, el período posparto, la lactancia o cuando está recibiendo radioterapia o quimioterapia. En estos casos, llamados vaginitis atrófica, una mujer puede tener un olor fétido, una secreción amarillenta e irritación del sitio, sequedad, ardor y dolor durante el coito. El tratamiento se puede realizar con el uso de lubricantes íntimos, o con reemplazo hormonal, que será indicado por el ginecólogo.

Además, el embarazo provoca cambios en el tejido que forma la vagina, debido a oscilaciones hormonales propias de la menstruación, que pueden provocar secreciones amarillentas y predisposición a infecciones, principalmente candidiasis. Cuando una mujer embarazada muestra alguno de estos síntomas, debe consultar a un obstetra lo antes posible para ver si hay una infección que tratar y controlar.

Cómo evitar la vaginitis

Para evitar este tipo de inflamación, la mujer debe tomar algunas precauciones como:

  • Evite usar pantalones ajustados en los días calurosos;
  • No te duches. Vea cómo realizar correctamente la higiene íntima femenina;
  • Dormir con ropa ligera o sin ropa íntima;
  • No use toallas sanitarias durante muchas horas seguidas;
  • Evite el uso innecesario de antibióticos;
  • No tengas relaciones íntimas sin protección.

El uso de condones también es importante para evitar diversos tipos de enfermedades de transmisión sexual como el VIH, la hepatitis B y C, la gonorrea, el VPH y la sífilis, que provocan muchas complicaciones y riesgo de muerte. Obtenga más información sobre estas enfermedades y cómo evitarlas.

Deja un comentario