El dolor de oído es un síntoma muy común, que puede ocurrir sin una razón aparente o una infección, y a menudo es causado por la exposición prolongada al frío o la presión durante un resfriado.
Por tanto, aunque no es necesario realizar un tratamiento específico con antibióticos o cualquier tipo de medicamento, existen algunos remedios naturales que se pueden hacer en casa para paliar las molestias. Ya sea en niños o adultos, el dolor de oído tiende a empeorar por la noche y empeora con la aparición de sinusitis o alergias.
Sin embargo, si el dolor dura más de 2 o 3 días para aliviarlo, es recomendable acudir a un médico de cabecera para valorar si existe una infección que necesite ser tratada con antibióticos. Vea cuáles son las principales causas del dolor de oído.
1. Compresa caliente
La simple compresa tibia proporciona suficiente calor para aumentar la circulación en el oído, lo que ayuda a deconstruir el oído. Para utilizar esta sencilla técnica, debe colocar un paño limpio y tibio sobre la oreja durante 5 a 10 minutos, para que no se caliente demasiado y la piel no se queme. Esta es una excelente manera de aliviar el dolor de oído en los niños, ya que no causa ninguna molestia.
Otra opción es usar un secador de pelo en la posición más baja a unos centímetros de la oreja, para no quemar la oreja. Esta forma es especialmente interesante cuando el dolor en el oído se produce después de nadar, ya que ayuda a secar el canal auditivo. Obtenga más información sobre otras formas sencillas de sacar agua de su oído.
2. Chicle
Masticar chicle es una de las formas más fáciles y sencillas de aliviar el dolor de oído. Esto se debe a que el movimiento de masticación ayuda a masajear los músculos alrededor de la oreja, abriendo la trompa de Eustaquio. Estos tubos son pequeños canales que conectan el oído con la garganta y permiten eliminar las secreciones que se acumulan en él, aliviando así el dolor.
3. Aplicar gel
Aunque en la mayoría de los casos, aplicar una compresa tibia puede parecer una mejor manera de brindar un mayor alivio, hay situaciones en las que el dolor se reduce solo cuando se aplica un resfriado en el área. Esto se debe a que el frío ayuda a reducir la inflamación del oído y permite que las terminaciones nerviosas se adormezcan.
Para aprovechar el frío, coloca un poco de hielo en una bolsa de plástico, luego coloca la bolsa sobre la oreja y la zona que la rodea, protegiéndola con un paño limpio. En ningún caso se debe aplicar la bolsa de hielo directamente sobre la piel, especialmente en el caso de niños o ancianos, ya que puede provocar quemaduras.
4. Darse un masaje
Realizar un ligero masaje puede ser otra forma sencilla de aliviar el dolor de oído, sobre todo cuando se produce después de situaciones muy estresantes, pues el masaje ayuda a relajar los músculos que pueden estar contraídos por el estrés y la ansiedad excesivos.
Para realizar el masaje hay que realizar movimientos de arriba a abajo con el pulgar, empezando por detrás de la oreja y aplicando una ligera presión a medida que desciende hasta el cuello. Luego, se debe repetir el mismo movimiento en la parte frontal de la oreja.
5. El cuello se estira
Estirar el cuello también es otra opción para relajar los músculos y aliviar el dolor de oído, especialmente cuando hay un estrés excesivo. Uno de los estiramientos más efectivos es mantener la espalda recta y luego, sin girar el cuerpo, mirar hacia un lado y sostener la cabeza durante 10-15 segundos, luego girar hacia el otro lado e inclinar la cabeza hacia atrás.
Otro estiramiento que se puede usar es mirar hacia adelante y luego inclinar la cabeza hacia un lado para que la oreja esté más cerca del hombro. Luego, esta posición debe mantenerse con la mano del mismo lado y mantenerse durante 10 a 15 segundos. Al final debería repetirse en el otro lado.
Cuando ver a un doctor
En la mayoría de los casos, el dolor de oído no es un síntoma grave y puede aliviarse en casa; sin embargo, es importante consultar a un médico si:
- El dolor no mejora después de 2 o 3 días;
- Pueden aparecer otros síntomas como fiebre, dolor de cabeza intenso o mareos;
- Hay presencia de pus o cualquier tipo de líquido que sale del oído;
- Dificultad para abrir la boca.
En estos casos, puede desarrollarse una infección de oído y es importante iniciar un tratamiento adecuado con antibióticos como Amoxicilina, por ejemplo. Obtenga más información sobre el tratamiento del dolor de oído.