La pericoronitis o pericoronitis es una situación en la que se produce una inflamación, acompañada o no de infección, de las encías que recubren parcialmente el diente, provocando dolor, hinchazón local y mal aliento. Aunque la pericoronitis puede ocurrir en cualquier diente, es más común en los terceros molares, conocidos popularmente como muelas del juicio.
Esta afección se produce principalmente por la acumulación de restos de comida en la región y, como suele ser de difícil acceso, cepillarse los dientes no es suficiente para eliminarlos. Así, favorece el crecimiento de bacterias, provocando inflamación e infección.
El tratamiento para la pericoronitis se realiza según las indicaciones del dentista, quien generalmente recomienda el uso de medicamentos antiinflamatorios y analgésicos para aliviar el dolor y, cuando no hay signos de infección, se puede recomendar la extracción del exceso de encía o diente. en el juicio.
Principales síntomas
Los síntomas de la pericoronitis están relacionados principalmente con el nacimiento de las muelas del juicio y por ello suelen aparecer después de los 20 años, y los principales son:
- Dolor leve o irradiado en los oídos o la cabeza;
- Hinchazón local;
- Mal aliento;
- Sangrado de las encías;
- Dificultad para masticar o tragar;
- Agrandamiento de las glándulas del cuello;
- Incomodidad;
- Baja temperatura
El diagnóstico de pericoronitis lo realiza el odontólogo a partir del análisis de los síntomas que presenta la persona, así como de la evaluación de las encías y las pruebas de imagen, durante las cuales se observa la posición de los dientes en la arcada, junto al lugar. y la posición de crecimiento de la muela del juicio, que ayuda al dentista a definir la mejor forma de tratamiento.
Posibles Causas
La pericoronitis se asocia principalmente al nacimiento del tercer molar, ya que el hecho de que el diente quede parcialmente retenido provoca inflamación de la zona alrededor del diente, además de complicar la higiene, impidiendo la eliminación completa de los alimentos acumulados en la zona. que favorece el crecimiento de bacterias y la formación de placa, por ejemplo.
Asimismo, otras situaciones que pueden provocar pericoronitis son la mala higiene o la mala higiene bucal, la presencia de placa dental entre la corona del diente y las encías, y los traumatismos en los tejidos blandos que recubren la corona del diente.
Cómo se realiza el tratamiento
El tratamiento para la pericoronitis se realiza de acuerdo con las instrucciones del dentista y puede variar según la gravedad de la inflamación. Generalmente, el uso de fármacos antiinflamatorios y analgésicos está indicado para reducir la hinchazón y aliviar el dolor, como el ibuprofeno y el paracetamol, por ejemplo. Además, cuando hay signos de infección, el dentista puede recomendar el uso de antibióticos para combatirla, como la amoxicilina, por ejemplo.
En aquellas situaciones en las que la pericoronitis se asocia al tercer molar, tras la desaparición de los signos inflamatorios e infecciosos, el odontólogo puede sugerir la extracción dentaria o gingivectomía, que consiste en retirar el exceso de encía, que en determinadas situaciones facilita la erupción dentaria.
El tratamiento para la pericoronitis generalmente toma varios días, pero si no se realiza correctamente o si la limpieza de los dientes no se realiza o se realiza de manera incorrecta, pueden ocurrir complicaciones como infecciones graves. por ejemplo, lo que puede extender el tiempo de tratamiento.
Opciones de tratamiento en el hogar
Se puede realizar un tratamiento en el hogar para aliviar los síntomas, pero no reemplaza las indicaciones del dentista. Para aliviar la hinchazón y el dolor, se puede aplicar una compresa fría en la región durante unos 15 minutos.
También se puede hacer enjuague con agua tibia y sal, ya que ayudan a combatir posibles agentes infecciosos y aceleran el proceso de curación, pero esto solo debe hacerse según las indicaciones del dentista, de lo contrario puede empeorar la condición clínicamente en el rostro.