La celulitis infecciosa, también conocida como celulitis bacteriana, ocurre cuando las bacterias ingresan a la piel, infectando las capas más profundas y provocando síntomas como enrojecimiento intenso de la piel, dolor e inflamación en la zona afectada.
A diferencia de la celulitis popular, que en realidad se llama fibroedema queloide subcutáneo, la celulitis infecciosa puede causar complicaciones graves como la septicemia, que es una infección general del cuerpo, e incluso la muerte si no se trata adecuadamente.
De esta forma, ante la sospecha de una infección cutánea, es muy importante acudir a urgencias para hacer un diagnóstico e iniciar el tratamiento adecuado, que suele hacerse con el uso de antibióticos para combatir las bacterias causantes de la enfermedad. dise.
Principales síntomas
Algunos de los síntomas que ayudan a identificar un caso de celulitis infecciosa son:
- Dolor en la región afectada;
- Extensas regiones de enrojecimiento de la piel;
- Extensa región roja en la parte del cuerpo afectada;
- Fiebre superior a 38ºC;
- Ligera inflamación de la región con producción de pus;
- Ganglios linfáticos agrandados cerca de la región afectada.
En los casos más graves, los síntomas más comunes de la celulitis infecciosa pueden incluir temblor, fiebre, fatiga, mareos, sudoración excesiva y dolores musculares. Los síntomas como somnolencia, ampollas o rayas rojas en la piel pueden ser signos de que la celulitis infecciosa está empeorando.
Todos estos síntomas pueden ser signo de otro tipo de infecciones cutáneas, especialmente la erisipela, que es una enfermedad que afecta a las capas más superficiales de la piel. Por este motivo, se debe consultar a un médico de cabecera o dermatólogo para conocer la causa exacta con el fin de iniciar el tratamiento más adecuado.
Causas de la celulitis infecciosa
La celulitis infecciosa ocurre cuando bacterias como estafilococos o estreptococos logran ingresar a la piel. Por esta razón, este tipo de infección es más común en personas con heridas quirúrgicas o cortes y picaduras que no han sido tratados adecuadamente.
Además, las personas con problemas cutáneos que pueden provocar cortes como eccema, dermatitis o micosis también tienen un mayor riesgo de desarrollar celulitis infecciosa, al igual que las personas con sistemas inmunitarios debilitados o que padecen enfermedades como la diabetes.
¿La celulitis infecciosa es contagiosa?
En personas sanas, la celulitis infecciosa no es contagiosa porque no se transmite fácilmente de una persona a otra. Sin embargo, si alguien tiene una herida o una afección de la piel, como dermatitis, y entra en contacto directo con el área afectada por la celulitis, existe un mayor riesgo de que las bacterias entren en la piel y causen celulitis infecciosa.
Cómo se hace el diagnóstico
En la mayoría de los casos, el dermatólogo identifica la celulitis infecciosa observando los síntomas, sin embargo, debido a que los síntomas pueden ser similares a otros tipos de infecciones de la piel, especialmente erisipela, el médico puede solicitar un examen, análisis de sangre o evaluación de una muestra del afectado. piel en laboratorio para confirmar el tipo de bacteria causante de la infección y prescribir el antibiótico más adecuado.
Cómo distinguir la celulitis infecciosa de la erisipela
La principal diferencia entre la celulitis infecciosa y la erisipela es que mientras que la celulitis infecciosa llega a las capas más profundas de la piel, en el caso de la erisipela la infección ocurre más en la superficie. Sin embargo, algunas diferencias que pueden ayudar a identificar las dos situaciones son:
Infección superficial | Infección de la dermis profunda y del tejido subcutáneo. |
Es fácil identificar el tejido infectado de lo que no lo está, ya que tiene grandes manchas. | Es difícil identificar el tejido infectado de lo que no lo es, ya que hay pequeñas manchas. |
Más común en las extremidades inferiores y la cara | Más común en las extremidades inferiores |
Sin embargo, los signos y síntomas de estas enfermedades son muy similares, por lo tanto, el médico de cabecera o dermatólogo debe examinar la zona afectada y puede sugerir la realización de diversas pruebas para identificar la causa exacta, identificar los signos de gravedad y comenzar un tratamiento más eficaz. Comprende qué es la erisipela y cómo tratarla.
Cómo se realiza el tratamiento
El tratamiento de la celulitis infecciosa generalmente comienza con el uso de antibióticos orales como clindamicina o cefalexina durante 10 a 21 días. Durante este período, es recomendable tomar todos los medicamentos a la hora prescrita por el médico, así como observar la evolución del enrojecimiento de la piel.
Si el enrojecimiento de la piel aumenta o cualquier otro síntoma empeora, es muy importante acudir nuevamente al hospital, porque el antibiótico que le recetaron puede no tener el efecto esperado y requerir reemplazo.
Además, su médico puede recetarle analgésicos, como Paracetamol o Dipiron, para aliviar los síntomas durante el tratamiento. También es importante realizarse exámenes cutáneos periódicos, para tratar heridas en el centro de salud o incluso aplicar una crema adecuada que contenga antibióticos, los cuales deben ser recomendados por el médico para garantizar el éxito del tratamiento.
Por lo general, los síntomas mejoran dentro de los 10 días posteriores al inicio de los antibióticos, pero si los síntomas empeoran, puede ser necesario cambiar el antibiótico o permanecer en el hospital para recibir tratamiento intravenoso para evitar que la infección se propague por todo el cuerpo.