La hemodiálisis es un tipo de tratamiento que tiene como objetivo favorecer la filtración de la sangre cuando los riñones no funcionan correctamente, favoreciendo la eliminación del exceso de toxinas, sales minerales y líquidos.
Este tratamiento debe ser prescrito por un nefrólogo y generalmente se realiza en personas con insuficiencia renal y debe realizarse en un hospital o clínica de hemodiálisis. El momento y la frecuencia de las sesiones de diálisis pueden variar según la gravedad del compromiso renal, y se pueden programar sesiones de 4 horas de 3 a 4 veces por semana.
Para qué sirve
La hemodiálisis se realiza siguiendo las instrucciones del nefrólogo y su finalidad es filtrar la sangre, eliminando sustancias tóxicas, como la urea; exceso de minerales, como sodio y potasio; y filtrar el exceso de agua del cuerpo.
Este procedimiento puede estar indicado en casos de insuficiencia renal aguda en los que hay insuficiencia renal repentina y temporal, o también en casos de insuficiencia renal crónica en los que la función renal necesita ser reemplazada de forma permanente. Descubra qué es la insuficiencia renal, sus síntomas y causas.
Como funciona
La hemodiálisis se realiza mediante un dispositivo llamado dializador, en el que la sangre circula y pasa a través de un filtro que elimina sustancias que circulan en exceso y pueden ser perjudiciales para el organismo. Esto es posible debido a la presencia de una membrana específica que se encarga de superar esta función.
La sangre que se va a filtrar sale a través de un catéter insertado en los vasos sanguíneos. Después de la filtración, la sangre pura, libre de toxinas y con menos líquido, vuelve al torrente sanguíneo a través de otro catéter.
En personas que a menudo necesitan hemodiálisis, es posible realizar una pequeña operación para conectar una vena a una arteria, formando una fístula arteriovenosa, que se convierte en un vaso con alto flujo sanguíneo y alta resistencia a punciones repetidas, lo que facilita el procedimiento.
¿Se realiza hemodiálisis durante la vida?
En los casos de insuficiencia renal crónica, en los que los riñones ya no funcionan correctamente, la terapia de reemplazo renal debe mantenerse durante toda la vida o hasta que se haya realizado un trasplante de riñón.
Sin embargo, hay casos de insuficiencia renal aguda en los que los riñones pierden su función de forma repentina y temporal, como en el caso de una infección grave, intoxicación por medicamentos o complicación cardíaca, por ejemplo, donde solo una o unas pocas sesiones de diálisis al los riñones vuelven a la normalidad.
¿Deben tomar medicamentos las personas en hemodiálisis?
La hemodiálisis no reemplaza completamente la función renal y algunas vitaminas se pierden durante la diálisis. Por esta razón, un nefrólogo puede recetar una terapia de reemplazo con calcio, vitamina D, hierro, eritropoyetina y antihipertensivos para ayudar a controlar la presión arterial.
También es necesario que la persona tenga cuidado con la alimentación, que controle el consumo de líquidos, sales y que elija correctamente los tipos de alimentos que se consumen a diario, pues la hemodiálisis tiene un día y horario programados. Por ello, también se recomienda el seguimiento por parte de un nutricionista.
Complicaciones de la hemodiálisis
En la mayoría de las sesiones de hemodiálisis, el paciente no sentirá molestias, pero en ocasiones pueden presentarse algunas complicaciones, como:
- Dolor de cabeza;
- Obstáculo;
- Caída de la presión arterial;
- Reacciones alérgicas;
- Vómitos
- Temblores
- Desequilibrio de electrolitos en la sangre;
- Ataques
Por estos motivos, la hemodiálisis siempre se realiza en presencia de un médico y una enfermera.
También puede haber una fuga de la fístula, lo que provoca la obstrucción del flujo sanguíneo. Para evitar que esto suceda, se recomienda tener cuidado, como no medir la presión arterial, extraer sangre o aplicar medicamentos en la mano con una fístula.
En caso de hematomas en la zona, se recomienda aplicar compresas frías durante el día y compresas calientes en los días siguientes. Adicionalmente, en caso de que sienta que el flujo en la fístula está disminuyendo, es necesario contactar al médico o enfermero acompañante, ya que es un signo de mal funcionamiento.