7 diuréticos naturales para combatir la hinchazón y la retención de líquidos

Algunos diuréticos con activos naturales que se pueden adquirir en cápsulas y que ayudan a combatir la retención de líquidos son la Centella Asiática y la Cola de Caballo, ayudan a reducir la hinchazón y se conocen popularmente como diuréticos adelgazantes.

Sin embargo, los diuréticos ayudan a eliminar la orina combatiendo la hinchazón, pero no queman grasas, por lo que es normal notar una disminución del volumen corporal debido a la excreción de agua.

Ejemplos de diuréticos naturales y cómo tomarlos.

Algunos ejemplos de diuréticos naturales que se pueden encontrar en farmacias y hogares naturales son:

  1. Chispa asiática: Es una planta que actúa como antiinflamatorio y estimulante de la circulación sanguínea. Se recomienda tomar 1 o 2 cápsulas hasta 3 veces al día con las principales comidas.

  2. Cuerpo: Se puede encontrar solo o en combinación con otras plantas con efecto drenante, limpia el organismo y reduce las toxinas en la sangre. Tomar 2 cápsulas al día.

  3. Cola de caballo: Es un excelente diurético y antiinflamatorio natural que ayuda en el proceso de adelgazamiento. Tomar como máximo 3 veces al día.

  4. Hibisco: Ayuda a eliminar sustancias tóxicas y fluidos acumulados en el organismo. Tome 500 mg de 1 a 2 veces al día.

  5. Diente de león: Aumenta la producción de orina y es excelente contra las infecciones del tracto urinario. Tomar de 1 a 3 cápsulas al día.

  6. Cáscara Sagrada: Además de su efecto diurético, es estimulante y laxante. Tomar 1 o 2 cápsulas al día.

  7. Té verde: Tiene antioxidantes, flavonoides y catequinas y además de su efecto diurético, también ayuda a quemar grasas. Tomar 1 cápsula con las comidas principales.

Los diuréticos cuando se usan en exceso pueden causar deshidratación, por lo que siempre que se ingiera un diurético, se debe aumentar la ingesta de agua para que el cuerpo excrete más líquidos y toxinas.

Cuando tomar diuréticos

Los diuréticos, incluso si son naturales, solo deben usarse bajo pautas médicas o nutricionales y pueden usarse para:

  • Eliminar el exceso de líquido del cuerpo durante el síndrome premenstrual, después de un día de comer en exceso, por ejemplo;

  • Regular la presión arterial ya que reduce el exceso de agua, facilitando la circulación sanguínea por las arterias;

  • Lucha contra la celulitis porque una de las principales razones es la retención de agua;

  • Para la prevención y el tratamiento de la infección del tracto urinario porque cuanta más orina se produce, más bacterias se eliminan de la uretra;

  • Lucha contra la hinchazón de las piernas y la sensación de piernas cansadas o pesadas debido a la presencia de varices;

  • Combatir el linfedema, que es la hinchazón que se produce después de la cirugía.

Normalmente, los diuréticos actúan directamente sobre los riñones, evitando que el cuerpo reabsorba el agua y la elimine a través de la orina. Una excelente manera de potenciar un diurético después de tomarlo es hacer al menos 40 minutos de actividad física, ya que la contracción muscular estimula la circulación sanguínea y lleva más agua a los riñones.

Posibles efectos secundarios.

El tratamiento con diuréticos, aunque sea natural, puede provocar síntomas como: falta de potasio en sangre, baja concentración de sodio, dolor de cabeza, sed, mareos, calambres, diarrea y colesterol alto. Estos efectos pueden ocurrir cuando se toman cantidades excesivas de diuréticos sin la orientación adecuada.

Contraindicaciones

Los diuréticos, aunque son naturales, no deben ser tomados por personas que se estén sometiendo a un tratamiento de control de la presión arterial o que tengan alguna anomalía cardíaca o renal que sea perjudicial para su salud en estos casos. Los diuréticos están contraindicados durante el embarazo y la lactancia.

Deja un comentario