El sangrado, la hinchazón y el dolor a menudo ocurren después de la extracción de un diente o un diente, lo que causa malestar y puede dificultar la cicatrización. Por este motivo, existen algunas preocupaciones que el dentista señala que deben realizarse después de la cirugía.
Las primeras 24 horas son las más importantes, pues en ese período se forma un coágulo en el lugar donde se extrajo el diente, lo que ayuda a la cicatrización, por lo que el cuidado debe continuar por 2 a 3 días o según el dentista. instrucciones.
Además de los cuidados específicos, es importante no hacer ejercicio durante las primeras 24 horas para evitar un aumento del sangrado y comer solo después de que el efecto de la anestesia haya desaparecido por completo, ya que existe el riesgo de morderse la mejilla, la lengua o el labio.
1. Cómo detener el sangrado
El sangrado es uno de los principales síntomas que se presenta después de la extracción de un diente o diente y suele durar varias horas. Por tanto, una forma de controlar esta pequeña cantidad de sangrado es poner un trozo de gasa limpia en el espacio vacío que deja el diente y morderlo durante unos 45 a 60 minutos, lo que genera presión en la región que ayuda a detener el sangrado.
Por lo general, el dentista muestra este procedimiento después de la extracción, ya que puede salir del consultorio con la gasa colocada. Sin embargo, es recomendable no cambiar la gasa en casa.
Sin embargo, si el sangrado no disminuye, se puede colocar una bolsita de té negro húmedo en el lugar de la extracción durante al menos 45 minutos. El té negro contiene ácido tánico, una sustancia que ayuda a que la sangre se coagule, deteniendo el sangrado más rápido.
2. Cómo asegurar la curación
El coágulo de sangre que se forma en el sitio del diente es muy importante para asegurar la curación adecuada de las encías. Por lo tanto, una vez que el sangrado se ha detenido, es recomendable tener cuidado con lo que ayuda a mantener el coágulo en el lugar correcto como por ejemplo:
- Evite enjuagarse la boca en exceso, cepillarse en el lugar de la extracción o escupir, ya que esto puede eliminar el coágulo;
- No toque donde estaba el diente; ya sea con un diente o con una lengua;
- Mastique con el otro lado de la boca; para no quitar coágulos con trozos de comida;
- Evite comer alimentos muy duros o calientes o tomar bebidas calientes, como café o té, ya que pueden eliminar los coágulos;
- No fume, beba con una pajita ni se suene la nariz, ya que esto puede provocar diferencias de presión que eliminen el coágulo.
Este cuidado es muy importante en las primeras 24 horas después de la extracción del diente, pero puede continuarse durante los primeros 3 días para garantizar una buena cicatrización.
3. Cómo reducir la hinchazón
Además del sangrado, a menudo hay una ligera hinchazón de las encías y la cara alrededor del diente extraído. Para aliviar esta molestia, es importante aplicar compresas de hielo en el rostro, donde estaba el diente. Este procedimiento se puede repetir cada 30 minutos, de 5 a 10 minutos.
Otra opción es comer helado, pero es muy importante hacerlo con moderación, sobre todo en el caso de helados con mucha azúcar, porque pueden dañar la salud de los dientes. Por lo tanto, después de comer helado, es conveniente cepillarse los dientes, pero sin cepillar el lugar donde se extrajo el diente o el diente.
4. Cómo aliviar el dolor
El dolor es muy común en las primeras 24 horas, pero puede variar de persona a persona, sin embargo, en casi todos los casos, el dentista prescribe analgésicos o antiinflamatorios como ibuprofeno o acetaminofén, que alivian el dolor y deben tomarse bajo guía. .al dentista.
Además, si se toma el cuidado necesario para detener el sangrado y reducir la hinchazón, es posible reducir el nivel de dolor y, en algunos casos, es posible que no sea necesario el uso de medicamentos.
5. Cómo evitar la infección
La boca es un lugar con mucha suciedad y bacterias y por ello, después de la cirugía de extracción dental, es muy importante tener cuidado para evitar posibles infecciones. Algunas preocupaciones incluyen:
- Lávese siempre los dientes después de comer, evitando pasar el cepillo por donde estaba el diente;
- Evite fumar, ya que los productos químicos de los cigarrillos pueden aumentar el riesgo de infecciones bucales;
- Enjuague con agua y sal de 2 a 3 veces al día, 12 horas después de la cirugía, para eliminar el exceso de bacterias.
En algunos casos, el dentista puede prescribir el uso de antibióticos, que deben tomarse hasta el final del tratamiento y según las recomendaciones del médico.