El choque hipovolémico, también conocido como choque hemorrágico, es una afección grave que ocurre cuando se pierde una gran cantidad de sangre, lo que hace que el corazón deje de bombear la sangre necesaria a todos los órganos y tejidos, provocando una descompensación a nivel del metabolismo y de la vida del individuo. en peligro.
Este tipo de choque ocurre con mayor frecuencia después de un traumatismo por un accidente automovilístico o una caída desde una gran altura, pero también puede ocurrir durante la cirugía. Para tratar este shock y evitar complicaciones, es necesario acudir rápidamente al hospital para tratar la causa de la pérdida de sangre y compensar transfundiendo sangre o reponiendo líquidos por vía intravenosa.
Los principales signos y síntomas.
Los principales signos y síntomas que se presentan cuando se produce este tipo de shock son:
- Dolor de cabeza persistente, que puede empeorar.
- Baja tensión;
- Fatiga excesiva y mareos;
- Náuseas y vómitos;
- Piel muy pálida y fría;
- Confusión;
- Respiraciones breves y superficiales;
- Dedos y labios azules;
- Sudoración excesiva;
- Ansiedad;
- Pulso débil;
- Sensación de inconsciencia o pérdida del conocimiento.
En muchos casos, el shock hipovolémico es fácil de identificar, especialmente si el sangrado es visible, sin embargo, hay algunas situaciones en las que el sangrado es interno y estos signos pueden ser más difíciles de detectar. Algunos de los síntomas que se pueden notar cuando hay una hemorragia interna son: pérdida de sangre por orificios como la boca, la nariz o por la región genital; dolor e hinchazón abdominal; presencia de sangre en el vómito, la orina o las heces y; Dolor de pecho.
Posibles Causas
El choque hipovolémico suele ocurrir cuando hay sangrado que provoca una pérdida excesiva de sangre, como ocurre en casos de cortes o heridas muy profundas, accidentes automovilísticos, caídas de grandes alturas, hemorragias internas, úlceras sanguinolentas y menstruaciones muy abundantes.
Además de esto, las situaciones que causan pérdida de líquidos también pueden contribuir a una reducción en la cantidad de sangre en el cuerpo. Algunas de estas causas incluyen diarrea prolongada, quemaduras muy graves o vómitos excesivos.
Cómo ocurre el shock hipovolémico
Debido a que hay menos líquido y / o sangre en el cuerpo, el corazón no puede bombear sangre, que contiene oxígeno, a todos los órganos y tejidos, lo que provoca la muerte celular y la pérdida de la función de los órganos vitales, lo que resulta en un síndrome de disfunción múltiple. tratada a tiempo, puede provocar la muerte del individuo.
El shock hipovolémico puede ser fatal, causando un ataque cardíaco, gangrena de las extremidades y daño permanente al cerebro, los riñones u otros órganos.
Cómo se realiza el tratamiento
El tratamiento del shock hipovolémico es mediante transfusión de sangre y administración de suero directamente por vía intravenosa. Además de esto, se debe tratar la causa del sangrado, ya que es fundamental para detener el sangrado o la situación que provoca la pérdida de líquidos.
Para morir por shock hipovolémico, la cantidad de sangre y / o líquido perdido debe ser 1/5 del volumen total de sangre humana, lo que significa que la pérdida debe ser de aproximadamente 1 litro de sangre.
Primeros auxilios para el shock hipovolémico.
El shock hipovolémico es una situación de emergencia que debe tratarse lo antes posible. Entonces, en caso de duda, debe:
- Llame a una ambulancia inmediatamente el número de emergencia de su país;
- Controlar el sangrado presionando con un paño limpio;
- Acuéstese boca abajo y levante los pies unos 30 cm., suficiente para estar por encima del nivel del corazón, siempre que la lesión no sea en la cabeza, el cuello, la columna o la pierna;
- Mantén tu cara caliente, usando mantas o ropa para prevenir una bajada de temperatura corporal;
- En caso de sospecha de daño espinal, el individuo no debe moverse, y la cabeza debe mantenerse alineada con la columna vertebral;
- Afloja la ropa en caso de que esté apretado.
Todo esto debe hacerse con la intención de minimizar la pérdida de sangre y dejar tiempo para que llegue el equipo médico, evitando que la persona pierda más sangre.